Úrsula Corberó: su edad, su pareja, dónde vive y la dura historia de su madre y su hermana
Todo sobre la actriz
Úrsula Corberó vuelve a ser invitada de El Hormiguero, esta vez para hablar de otra producción internacional como es El Chacal, serie en la que comparte reparto con otra estrella como es el actor Eddie Redmayne. Ahora mismo es una de las actrices más conocidas a nivel internacional y disfruta del éxito y el reconocimiento en su profesión, pero esto no ha sido así siempre. Antes de conseguir papeles tan conocidos como el de Tokyo en La Casa de Papel tuvo que hacer grandes esfuerzos para conseguir abrirse pase en el mundo de la interpretación. Además, su familia ha tenido que lidiar con muchos problemas y situaciones complicadas, que por suerte ya han superado, pero que no todos sus seguidores pueden imaginar cuando la ven en la pantalla.
Nació en el año 1989 en San Pedro de Vilamajor (un pueblo a las afueras de Barcelona) y allí siendo una niña decidió que después del instituto quería formarse para ser actriz, por eso comenzó a estudiar en la Escuela de Arte Dramático Eòlia, en Barcelona. Allí ya comenzó a despuntar y se presentó a todos los castings que podía, por lo que gracias a eso comenzó a realizar pequeños papeles en series como Cuenta Atrás o El internado, pero su primer papel importante le llegó en 2007 gracias a Física o química. En la serie juvenil de Antena 3 dio vida a Ruth, una joven inconformista y rebelde durante siete temporadas. Junto a Maxi Iglesias, Andrea Duro, Javier Calvo y Adam Jezierski, entre otros, se convirtió en una estrella para millones de adolescentes (y no tan adolescentes) que no se perdían cada semana los capítulos en un momentos en el que las plataformas de streaming todavía estaban por llegar. De ahí saltaría a películas como Perdiendo el norte, Cómo sobrevivir a una despedida, El árbol de la sangre o Lejos del mundo, pero entonces llegó el papel de su vida.
De nuevo en Antena 3, la cadena comenzó a emitir una serie de basada en un grupo de atracadores que asaltaban la fábrica de moneda y timbre de España con la intención de fabricar millones de euros y escapar con ellos. Aunque pueda parecer mentira, las audiencias de aquellos primeros capítulos de La Casa de Papel no fueron buenas en la televisión en abierto, pero por suerte Netflix y Atresmedia decidieron darle una segunda vida en la plataforma.
De ahí nació el mito de Tokio, papel por el que se ha dado a conocer en todo el mundo. Tras aquello se convirtió en una de las estrellas de Netflix, siendo llamada para numeras series y películas internacionales, siendo una de las primeras estrellas que han conseguido el éxito gracias al streaming.
Desde el año 2016 comparte su vida con Chino Darín, hijo del mítico Ricardo Darín. Aunque no se esconden, sí que intentar mantener lo más en secreto su vida privada, por lo que apenas se sabe que se conocieron durante el rodaje de la serie La embajada, en la que ambos trabajaban. Desde entonces no se han separado, pero tratan de estar lejos de la prensa del corazón y centrarse en su faceta profesional.
La dura vida de la madre y la hermana de Úrsula Corberó
Pero no todo en la vida de la actriz catalana es el triunfo ante las cámaras, ya que su familia no lo ha tenido nada fácil en su vida. Esther Delgado, su madre, fue rechazada por todo el mundo cuando se quedó embarazada con tan sólo 17 años, quedándose sin amigas y siendo expulsada del colegio para no dar un mal ejemplo.
Pese a todo, sacó adelante a sus dos hijas trabajando en todo lo que podía pese a no tener formación académica y haciendo lo imposible por llevar a la pequeña Úrsula a los castings para que pudiera entrar en el mundo de la publicidad y las series. Sin coche y a decenas de kilómetros de Barcelona, no dudó en pasar horas para acudir a las pruebas pasando más de un año hasta que la aceptaron en una.
Mónica, la hermana mayor de la actriz, tampoco lo ha tenido nada sencillo. Siendo madre de un hijo y cambiando de trabajo precario en trabajo precario, decidió que se iba a formar como tanatopractora (la persona que prepara los cuerpos de los fallecidos antes de entierros y funerales para retrasar la putrefacción).
En esto decidió invertir sus ahorros, pero una vez terminada su formación se encontró con la sorpresa de que las mujeres no eran muy bien recibidas en esta profesión, por eso ha tenido que luchar contra viento y marea para hacerse respetar. Por estos motivos, Úrsula Corberó no se olvida de sus raíces humildes y siempre que puede presume de que las mujeres de su vida son su gran ejemplo.