La nº 1 del BNG por Lugo blanquea la narcodictadura de Maduro llamando «golpista» a la oposición
Olalla Rodil niega que haya "hambre" en Venezuela o que el país esté "desabastecido"
La diputada soberanista acusa a la "derecha venezolana" de lanzar "continuos llamamientos a la violencia"
La cabeza de lista del BNG por Lugo a las elecciones autonómicas del 18F, Olalla Rodil, blanquea a la narcodictadura de Nicolás Maduro en Venezuela llamando «golpista» a la oposición. Así lo hizo, por ejemplo, en enero de 2019 cuando se pronunció en estos términos a favor del régimen chavista.
A través de un mensaje en redes sociales, esta diputada en el Parlamento gallego manifestó: «Golpe de Estado en Venezuela diseñado y orquestado por Estados Unidos y la OEA. Todo el apoyo al pueblo venezolano y a su presidente, Maduro, elegido democráticamente en las urnas».
Asimismo, Rodil hizo aquí una alusión implícita al separatismo catalán, apoyando entre líneas el referéndum ilegal del 1-O de 2017 en Cataluña. «Cuidado con quienes llaman golpe de Estado a poner las urnas en un referéndum, y democracia a derrocar a un presidente elegido en las urnas», sentenció la candidata soberanista.
Esta fue la reacción que tuvo Olalla Rodil a la autoproclamación del opositor Juan Guaidó como «presidente encargado» de Venezuela el 23 de enero de 2019. Dos semanas antes, la crisis política en el país caribeño se había agudizado al iniciar Maduro un segundo mandato que la oposición y gran parte de la comunidad internacional no reconocieron porque consideraban que era fruto de un proceso electoral fraudulento.
La Asamblea Nacional aprobó entonces una resolución en la que definía a Maduro como un «usurpador» del cargo y se arrogó el Poder Ejecutivo. En medio de las manifestaciones opositoras de aquellos, Juan Guaidó hizo ya la conocida autoproclamación: «Juro asumir formalmente las competencias del Ejecutivo Nacional como presidente encargado de Venezuela».
El 4 de febrero de aquel año, el Gobierno de España, en una declaración institucional del socialista Pedro Sánchez desde el Palacio de la Moncloa, reconoció oficialmente «al presidente de la Asamblea de Venezuela, al señor Guaidó Márquez, como presidente encargado de Venezuela». Al mismo tiempo, el jefe del Ejecutivo instó al régimen de Maduro a la convocatoria de elecciones presidenciales libres, democráticas y transparentes.
Ante ello, el BNG aprobó un comunicado con la siguiente literalidad: «Condenamos enérgicamente la violación del derecho internacional y negamos la capacidad del Estado español o de la UE de lanzar ultimátums a cualquier Estado soberano sobre cuándo debe o no convocar elecciones».
«Al final, por supuesto, no hay un deseo ‘democratizador’, sino la intención de apoderarse de los ricos recursos naturales de ese país, poniéndolos en manos de conocidas corporaciones económicas, también de capital español», añadieron los soberanistas.
Además, la número 1 del BNG por Lugo a las elecciones regionales de este domingo en Galicia tiene escritos criminalizando a la oposición venezolana. En agosto de 2017 escribió un artículo difundido desde la web del Bloque con el título Siete falacias y una pregunta sobre Venezuela, donde señaló a «líderes de la derecha venezolana», citando a Leopoldo López, Antonio Ledezma y Henrique Capriles, y les acusó de lanzar «continuos llamamientos a la violencia», a la «desobediencia», a «sacudir a Venezuela» y a «no enfriar la calle», en las semanas previas a la Asamblea Constituyente.
Con Rusia y China
En dicho artículo, la colaboradora de Ana Pontón aprovechó también para cargar contra buena parte de la comunidad internacional y negar que Venezuela se halle «aislada». «La Unión Europea, Estados Unidos y los gobiernos de derecha de América Latina condenan a Maduro y a la revolución bolivariana, pero ¿es eso estar aislado? Venezuela mantiene relaciones diplomáticas, políticas, comerciales y económicas con Rusia y China, así como con el bloque de no alineados. Es falso que el país esté aislado, pero este argumento demuestra que Occidente no ve más allá de su ombligo y piensa que el mundo termina en su frontera», recalcó la diputada del BNG por Lugo en el Parlamento gallego.
En otro pasaje del artículo, Rodil también niega que Venezuela sea una dictadura, que haya «hambre» o que este país esté «desabastecido» en materia de alimentos, medicinas y productos de primera necesidad para la población. Una argumentación que contradice lo recogido en numerosos informes por organizaciones internacionales de derechos humanos.
Junto a otros compañeros del grupo del BNG, Olalla también ha mantenido reuniones en la Cámara autonómica con representantes diplomáticos de Gobierno bolivariano de Maduro. Unos encuentros que sirvieron para estrechar lazos entre los nacionalistas gallegos y el régimen chavista.
Precisamente, cuando en febrero de 2019 el Parlamento gallego -con mayoría absoluta del PP- aprobó una iniciativa en apoyo de Juan Guaidó y la Asamblea Nacional de Venezuela, el BNG criticó que el Gobierno de España reconociera como «presidente encargado» al líder opositor, pero no dijera nada sobre Arabia Saudí, «donde las mujeres no pueden conducir sin ir acompañadas de un hombre», según dijeron los nacionalistas, o Israel, al que acusaron de «genocidio» en los Territorios Palestinos.