De la generación del ‘tiki-taka’ a la del ‘TikTok’

Los herederos ya están aquí. Pedri, Dani Olmo, Ferran Torres y Eric García confirmaron ante Croacia que el futuro está garantizado. A pesar de su juventud, los cuatro fueron claves para que España asegurase su presencia en los cuartos de final de la Eurocopa. Posiblemente, el duelo más importante de su carrera y lo superaron con un rendimiento fue sobresaliente.

Pedri fue el cerebro de España frente a Croacia. Un partido simplemente impresionante el del canario. Su pase entre las líneas rivales que dejó solo delante del portero a Koke es el ejemplo perfecto del recital que dio el futbolista del Barcelona. Un jugador alegre, que se divierte jugando y que guio al combinado nacional a los cuartos de final desde la medular. Junto al rojiblanco y Busquets desactivaron el centro del campo croata.

Luis Enrique siempre ha defendido la calidad de Pedri. Si ante Suecia, cuando se convirtió en el jugador más joven en participar en una Eurocopa con España, y Polonia estuvo algo tímido, frente a Eslovaquia empezó a demostrar lo que confirmó contra Croacia. Un futbolista de 18 años que tiene todo el futuro por delante, pero que en el presente ya es clave hasta el punto de que es el único jugador de campo, junto a Laporte, que ha disputado todos los minutos de esta Eurocopa.

Eric ya ejerce de jefe

Otro de los futbolistas que permiten a la selección española soñar con hacer grandes cosas es Eric García. El nuevo jugador del Barcelona ha arrebatado el puesto a Pau Torres y no ha tardado en convertirse en uno de los jefes de la defensa. Se entiende a la perfección con Laporte, saca muy bien el balón jugado y está siempre pendiente de su marca. Además, ante Croacia demostró el carácter que tantas veces ha recalcado Luis Enrique en sala de prensa que tiene. Mandó y ordenó, dejando claro que su madurez está muy por encima de su edad.

La alegría ofensiva de esta nueva España pertenece a Ferran Torres y Dani Olmo. Dos de los mejores jugadores de la Selección frente a Croacia. El futbolista del City fue titular y no tardó en convertirse en un quebradero de cabeza para la zaga rival. Una asistencia y un gol confirmar su partidazo. Por otro lado, el del Leipzig, que vivía un encuentro muy especial por su pasado en el fútbol croata, salió en el segundo tiempo y dio un recital. Dos pases de gol en la prórroga, un peligro constante y un disparo que se estrelló en el palo.