Varios profesores criticaron el bajonazo de calidad de la Complutense mientras se enchufaba a Begoña Gómez

Un grupo de profesores de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) criticaron en una carta enviada al rector Carlos Andradas la devaluación que estaba sufriendo la Universidad, en cuanto a la calidad del profesorado, mientras se enchufaba a la mujer de Pedro Sánchez.

Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno, fue contratada para codirigir un máster propio de la Complutense en el año 2014. Ella fue fichada pese a carecer de titulación universitaria y argumentando con carácter excepcional su gran “experiencia” en el sector del fundraising –materia que ha enseñado en este universidad pública desde entonces–.

Pero el profesorado no estaba en absoluto de acuerdo con las decisiones oficiales que se tomaban en aquellas fechas. La razón era que, lejos de aplicar las exigencias de mejora del profesorado que reclamaba el Real Decreto Wert de 2012 a todas las universidades, se estaban dejando sin aplicar los incentivos a los profesores con mayor capacidad investigadora y mayor proyección internacional.

La situación llegó a tal punto de queja entre los profesores que 35 de ellos firmaron un manifiesto en 2017 en el que reclamaron ante el rector apoyo a “la excelencia investigadora y la experiencia acumulada necesaria para hacerse acreedor a ella y más en una situación en que tal experiencia es más necesaria que nunca para facilitar el relevo generacional que es, según afirma su equipo rectoral, uno de los más graves problemas que aquejan a nuestra universidad”. “Confiamos en que la UCM muestre su voluntad de excelencia superando el insuficiente marco del Real Decreto”, añadía el manifiesto.

La mujer de Sánchez fue contratada a dedo y sin que se convocara la plaza

Lejos de contar con la complicidad del rectorado, lo cierto es que las condiciones de los profesores más potentes de la UCM no mejoraron. Y todo ello, mientras iban ganando espacio en la universidad personas como la mujer del presidente del Gobierno.

Hay que recordar que la Complutense contrató a dedo a la mujer de Sánchez sin convocar plaza por su “experiencia”. Esa es la explicación oficial que dio la Universidad Complutense para contratar a una persona que carecía de título universitario y cuya titulación era inferior incluso a la requerida a los propios alumnos del mismo máster.

La Universidad Complutense, además, duplicó los cursos de la mujer de Pedro Sánchez en contra de los pactos de la Universidad. Begoña Gómez mantuvo su cargo académico en dos titulaciones distintas pese a que las “disposiciones y acuerdos de los órganos de Gobierno de la Universidad Complutense” alcanzados en 2012 recogían en uno de sus artículos la indicación de que, en caso de la persona contratada como director de un “título propio” no fuera “un profesor de la Universidad Complutense de Madrid con vinculación permanente”, únicamente “con carácter excepcional, y por causas debidamente justificadas, se podrá autorizar la codirección de un Título Propio”.

Begoña Gómez, sin embargo, ha figurado en dos titulaciones diferentes: en el Máster en Fundraising y en el título propio de Técnico en Fundrasing impartido dentro de los programas de formación continua de la Universidad Complutense.

Ambas titulaciones las dio ubicada en un Centro Superior de la Complutense, el Centro Superior de Estudios de Gestión. La dirección de este centro, además, corre a cargo de Paloma Román Marugán, profesora de Pablo Iglesias y presidenta del tribunal de la tesis doctoral del líder de Podemos.