Congreso de los Diputados

Surrealismo en el Congreso: el PSOE se une al PP y Vox para tumbar una propuesta de sus socios de Sumar

El ala comunista del Gobierno exigía crear una empresa pública que gestione las centrales hidroeléctricas

PSOE Sumar
Yolanda Díaz y Pedro Sánchez.

El PSOE ha tenido que votar junto con el Partido Popular, Vox y los nacionalistas vascos y catalanes para tumbar una propuesta de Sumar, con la que el ala comunista del Gobierno pretendía crear una empresa pública para gestionar las centrales hidroeléctricas. Una evidencia más de las discrepancias en el seno del Ejecutivo de Pedro Sánchez, que hace menos de 24 horas veía decaer un texto sobre alquileres por el voto en contra de otro de sus socios parlamentarios, en ese caso, Junts. «Más que de coalición, es un Gobierno de colisión», aseguraba el portavoz de los populares en el Congreso, Miguel Tellado.

Durante el debate de la proposición no de ley que incluye esa propuesta la portavoz del PSOE en la Comisión de Transición Ecológica del Congreso, María de las Nieves Ramírez, ya avanzó que se desmarcaba del plan de Sumar porque, a su juicio, «no es necesario» crear esa empresa porque conllevaría «graves retrasos» en las concesiones «en detrimento del beneficio de los consumidores». La alternativa de Sumar a crear la empresa de cero es que fuera la actual Hunosa la que asuma la gestión de las concesiones, pero esta idea también la descartó el PSOE porque las empresas del Grupo SEPI «no tienen permitida la generación de electricidad, fruto de la actual normativa europea».

Una ruptura del Gobierno que ha evidenciado el portavoz del PP en el Congreso, Miguel Tellado, a través de sus redes sociales. «Hoy, de nuevo, la coalición de Gobierno se rompe en la votación de la PNL de Sumar sobre la creación de una empresa pública para la gestión de centrales hidroeléctricas. Más que de coalición, es un Gobierno de colisión. Esto se acaba, Pedro…», ha sentenciado.

Tanto PP como Vox se opusieron frontalmente a la propuesta del grupo plurinacional. El diputado de Vox, José María Figaredo, protestó contra la idea de que sea Hunosa la empresa pública que gestione las concesiones porque «acumula pérdidas millonarias ejercicio económico tras ejercicio económico». El portavoz energético del PP en el Congreso, Juan Diego Requena, justificó su oposición porque la medida supondría instaurar una «autarquía energética inédita en 70 años».

En el debate, ERC y Junts protestaron contra la idea de que sea una empresa estatal la gestione esas concesiones y no una catalana. «No queremos un organismo estatal que gestione activos catalanes», aseveró Junts, mientras que Teresa Jordá, de ERC, recomendó a Sumar prestar «mucha atención en meter las manos del Estado» en las competencias autonómicas. De su lado, la portavoz económica del PNV, Idoia Sagastizabal, remarcó que la soberanía energética no depende de si la gestión de la empresa «es pública o privada», sino que tiene que ver con una «buena y eficiente gestión de los recursos».

División en el seno del Gobierno

Lo cierto es que, estas discrepancias dentro entre los socios del Gobierno frankenstein de Pedro Sánchez se han convertido en el pan nuestro de cada día. Este mismo martes, Junts se sumaba a PP, Vox y UPN para tumbar en el pleno del Congreso la admisión a trámite de la proposición de ley los socios a la izquierda del PSOE para modificar la Ley de Arrendamientos Urbanos y limitar el alquiler de temporada y habitaciones.

Con ésta, el Gobierno de Sánchez suma una nueva derrota en la Cámara Alta, que se suma a la treintena de votaciones parlamentarias que ha perdido, como la de reconocer a Edmundo González como presidente electo de Venezuela, la toma en consideración Ley de Extranjería, la reducción de tiempo de trabajo y la del techo de gasto presupuestario.

Lo último en España

Últimas noticias