Sánchez defiende la reforma del delito de sedición tras la luz verde de ERC a los Presupuestos
Los favores hay devolverlos. Y eso bien lo sabe el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Ni una hora después de que ERC rechazase presentar una enmienda a la totalidad a los Presupuestos Generales del Estado, Sánchez ha dejado la puerta abierta a ceder en una de las principales reivindicaciones de los separatistas catalanes: la reforma del delito de sedición. Será una de las cuestiones que marcarán la negociación parlamentaria. Su partido rechazaba, hasta hace unas horas, que pudieran asumir eso.
Tras participar en el Consejo Europeo, y consciente de que para ERC la reforma de dicho delito que permitiría el retorno de los fugados e incluso que Oriol Junqueras pudiera volver a ser candidato en unas futuras elecciones catalanas, el presidente ha manifestado su apoyo a la tramitación parlamentaria de la reforma del Código Penal. Asegura que «para que se materialice necesitamos apoyos parlamentarios».
Pedro Sánchez considera que «tenemos un Código Penal que en algunos de los delitos no es homologable a las principales democracias europeas». El líder socialista compra así en su integridad el discurso de los separatistas. Unas palabras que contrastan con lo que manifestaban hace tan solo unos días en Moncloa y en el PSOE, que descartaban que la reforma de dicha ley se pudiera tramitar esta legislatura por las diferencias con sus socios -principalmente con ERC- respecto a la sedición.
El mismo Sánchez, en una conversación informal con los periodistas durante la celebración de la Fiesta Nacional el 12 de octubre, consideraba que «no se podrá hacer», ya que «nuestra propuesta es la de homologarlo al resto de países de Europa y eso no va a ser asumible para ERC». Todo parece haber cambiado en una semana y en el marco de las interminables conversaciones que miembros del Gobierno han mantenido con ERC y con Bildu para salvar el debate de enmiendas a la totalidad.
El jefe del Ejecutivo, en la misma rueda de prensa en la que ha celebrado también la posición que han adoptado los veintisiete estados miembros respecto a la limitación de los precios de la energía, ha agradecido a los grupos parlamentarios su negativa a paralizar la tramitación de las cuentas públicas a la primera de cambio. Sánchez confía en que durante la negociación que se abrirá ahora, y que pilotará principalmente la ministra de Hacienda y Función Pública María Jesús Montero, el Gobierno sea capaz de convencer a sus socios de la necesidad de que estos Presupuestos reciban luz verde. Pues tanto ERC como Bildu le han advertido que, aún no presentando enmienda a la totalidad, su voto a favor no está asegurado.