Iglesias dice que Sánchez tiene intención de negociar un acuerdo y hablar con los golpistas
"Estamos de acuerdo en ponernos de acuerdo. Las fuerzas progresistas tenemos que sumar fuerzas", ha dicho Pablo Iglesias, tras reunirse durante dos horas con Pedro Sánchez en La Moncloa.
El líder de Podemos, Pablo Iglesias, ha confirmado este martes la «voluntad positiva» del presidente en funciones, Pedro Sánchez, para «ponerse de acuerdo» sobre un futuro pacto.
«Estamos de acuerdo en ponernos de acuerdo. Las fuerzas progresistas tenemos que sumar fuerzas», ha dicho Iglesias, tras reunirse con Sánchez en La Moncloa durante dos horas. Ha considerado que «ése es el punto de partida para el trabajo que se desarrollará en las próximas semanas», para el que ha pedido «prudencia».
La conclusión a la que han llegado ambos, en definitiva, ha dicho Iglesias -en una rueda de prensa de apenas cinco minutos- es que buscarán el entendimiento para que «las fuerzas progresistas» gobiernen en España.
Preguntado sobre formar un «marco de entendimiento amplio» con formaciones independentistas, Bildu y nacionalistas, Iglesias ha confirmado que ambos líderes están «de acuerdo en que hay que hablar con todos los actores políticos» y en la «necesidad de inaugurar una nueva época en España en la que el diálogo sustituya a la sobreactuación».
Iglesias ha explicado, sin detalle, que en la reunión se ha hablado «mucho» de los «grandes desafíos» que afectan al país, entre los que ha citado «la precariedad de los jóvenes, medioambiente o pensiones». «La concreción llegará a su tiempo y tendremos que ser discretos», ha resuelto, simplemente.
Iglesias acudía esta tarde con con vocación de ofrecer a Sánchez un gobierno de coalición con mucho más peso de los socialistas. Una posición que contrasta con la del jefe del Ejecutivo, favorable a gobernar en solitario.
El líder podemita llegó puntual a la cita, a las 17.00 horas, la última de esta primera ronda de contactos que Pedro Sánchez inició ayer con Pablo Casado y siguió esta mañana con Albert Rivera. Iglesias llegó a la cita, dijo, sin «líneas rojas» y sin «arrogancias».
Iglesias llegó a bordo de un turismo blanco y acompañado de su jefe de gabinete Pablo Gentili y, tras el apretón de manos a las puertas de La Moncloa, Sánchez le condujo a la sala Tapies, lugar en el que el presidente recibe habitualmente a las visitas. Allí mantuvieron una conversación amigable mientras los gráficos tomaban imágenes.
Iglesias subrayó este lunes, durante su intervención en abierto en el Consejo de su partido, que exigiría a Sánchez entrar en un gobierno de coalición atendiendo a la proporcionalidad que le dan los 42 escaños obtenidos en las generales. Además, reiteró que entrar en ese gobierno, aunque fuera de forma «minoritaria», serviría para «cambiar cosas» y aplicar determinadas medidas progresistas.