El PP pide la unión con PSOE y C’s para enfrentar independentismo catalán
El vicesecretario de Organización del Partido Popular, Fernando Martínez-Maíllo, cree que la mejor manera de hacer frente al desafío independentista catalán es una unión de PP y PSOE, en la que también incluye a Ciudadanos.
Martínez-Maíllo se ha manifestado así en la sede del PP en Madrid, antes de la investidura de Carles Puigdemont como presidente de la Generalitat, y ha asegurado que las instituciones defenderán la unidad de España y el cumplimiento de la ley.
«No hay mejor manera de hacer frente al desafío independentista catalán que aquellos partidos con posibilidad de gobernar estén unidos en un gobierno fuerte y estable frente a los que quieren burlar la ley», ha expresado.
Ese gobierno fuerte, según Martínez-Maíllo, debería estar liderado por Mariano Rajoy.
«Ahora más que nunca no hay excusas» para que a partir del próximo miércoles, que empieza la legislatura, «logremos formar un gobierno lo más amplio posible de los grandes partidos», según el vicesecretario de Organización de los populares.
Estos partidos defienden «lo que creemos la mayor parte de los españoles, la unidad de España, la igualdad y el respeto a los derechos y libertades».
El PP ha dicho al PSOE que «espera más» que el apoyo ofrecido este domingo hacia la unidad de España, después de que el portavoz socialista en el Congreso, Antonio Hernando, trasladara el apoyo de su grupo al Gobierno en funciones de Mariano Rajoy para hacer respetar la ley en Cataluña si el nuevo Govern que presida Carles Puigdemont se salta la legalidad vigente.
Hernando ha rechazado cualquier actuación que pueda dar lugar al incumplimiento de la ley y de la Constitución.
Para Martínez-Maíllo, ayer se escenificó un acuerdo de última hora entre Junts pel Sí y la CUP para «ganar tiempo», forzando la democracia y las instituciones y apoyándose en dos tránsfugas.
También cree que con lo sucedido en Cataluña es el «entierro político» de Mas, el político que «más daño ha hecho a Cataluña y a los catalanes», y «más problemas artificiales ha creado a la sociedad española».
Según Martínez-Maíllo, el «proceso ilegal» del independentismo «no conduce a ningún sitio, «causará una profunda división en la sociedad catalana» y con todo ello se «renuncia a atender los grandes problemas» que tiene Cataluña.