El PP matizará las condiciones pese a las advertencias de Ciudadanos, como avanzó OKDIARIO

Unanimidad en el respaldo a Mariano Rajoy para negociar con Albert Rivera. Es el mensaje rotundo de cierre de filas que saldrá de la reunión del Comité Ejecutivo de este miércoles.

La reunión de la cúpula popular no prevé sorpresas, ni tampoco excesivas discrepancias con el contenido del documento enviado la pasada semana por  el líder de Ciudadanos.  Los populares consideran que las condiciones, seis- eliminación de aforamientos, expulsión de cargos imputados por corrupción, supresión de indultos por corrupción, reforma de la ley electoral, limitación de mandatos a ocho años y creación de una comisión de investigación sobre el caso Bárcenas- son «asumibles» aunque quieren dejar su sello propio. Liderar las negociaciones y administrar los tiempos.  Habrá concreciones y precisiones, añaden, la mayoría por razones de encaje jurídico.

Ello, pese a que desde Ciudadanos se ha advertido este mismo miércoles de que en caso de que el PP enmiende, corrija o matice estas condiciones se romperán las negociaciones.  Desde Ciudadanos se recuerda a Rajoy que las condiciones son “innegociables” y que su texto no admite cambios. «No hay matices contra la corrupción», avisan desde el partido de centro.

Malestar por la supresión de aforamientos

En el PP han aprovechado la última semana para trabajar sobre las exigencias de Rivera, de forma que Rajoy presentará en su próxima reunión con el líder de Ciudadanos un informe jurídico con precisiones sobre cómo llevarlas finalmente a la práctica.

Los principales retoques, como ya avanzó OKDIARIO, serán los referidos a las cuestiones que requieren de una reforma de la Constitución, y que, por tanto, necesitan también del apoyo de otras fuerzas políticas. En este apartado se incluye, por ejemplo, la reforma de la ley electoral, que Rivera quiere hacer más “proporcional”, o la eliminación de aforamientos.

Este último punto ha generado un visible malestar entre la cúpula del PP. Varias fuentes populares coinciden en que su supresión es “peligrosa” en la medida en que puede favorecer una desprotección de los políticos frente a acusaciones interesadas.

«No todos los políticos están aforados ni todos los aforamientos son políticos», recuerda Javier Maroto, vicesecretario sectorial del PP, que advierte un «debate importante» sobre esta cuestión.  También recibe críticas la propuesta de expulsar a los cargos investigados en tanto esté abierto el proceso judicial. Los populares defienden que esa expulsión debe limitarse al momento de apertura de juicio oral.

Otro de los puntos más sensibles es el de la Comisión de Investigación sobre el caso Bárcenas, que los populares pretenden que se amplíe a otros casos de corrupción, como los ERE del PSOE en Andalucía. En el caso de la reforma de la ley electoral, por ejemplo,  consideran que “no puede hacerse de inmediato” porque requiere también de una negociación con el PSOE. De hecho, el PP se ha mostrado siempre dispuesto a explorar este debate en tanto existiese consenso con el resto de fuerzas políticas.

No se espera excesivo debate sobre otro de los puntos de Ciudadanos, el referido a la reforma del voto rogado para residentes en el exterior, de forma que se haga más fácil y se reduzca la carga burocrática. El PP asume también que esto es una necesidad y no planteará objeciones. En el caso de las listas desbloqueadas, la propuesta es compartida ya por algunos dirigentes del PP, como la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes.

Ampliar las condiciones con otras propuestas

Los populares se muestran además dispuestos a ampliar esas condiciones con otras propuestas, de cara a negociar un posible acuerdo de gobierno, que desde Ciudadanos a día de hoy se rechaza. Los de Rivera no quieren avanzar más allá de un pacto para que la legislatura eche a andar, al estilo de los acuerdos suscritos en Madrid y Andalucía para sostener estos gobiernos autonómicos.

“Se trata de que hoy salga algo más que un simple sí. Tiene que quedar claro que hay suficientes ganas para desatacar la situación de nuestro país y cuanto antes mejor”, considera Maroto.

El presidente del Grupo Popular del Parlament, Xavier García Albiol, cree que las exigencias de Ciudadanos deben entenderse como una “hoja de ruta” para vertebrar las negociaciones. “Conceptualmente podemos coincidir, esto no es un todo o nada. Es una hoja de ruta para negociar”, ha observado.

Ausencia de Barberá

El Comité ha confirmado la ausencia de la exalcaldesa de Valencia, Rita Barberá. Fuentes del partido lo han excusado en que la senadora ya no venía asistiendo a anteriores citas.  Su presencia, en un debate sobre condiciones referidas a la corrupción- Barberá no está imputada en el caso Taula aunque Fiscalía lo ha solicitado- era sin duda polémica e incómoda para los populares.

A la reunión tampoco asiste Ana Mato, que renunció a su puesto en el órgano de dirección del PP el mismo día en que se conoció la convocatoria del cónclave. Ignacio González, expresidente de la Comunidad de Madrid y con un expediente abierto por el caso Ático tampoco asiste. González dimitió en enero de sus responsabilidades como secretario del PP madrileño.

La investidura «no está en el orden del día»

Superado el trámite del Comité Ejecutivo- en el que no habrá votación a mano alzada- Rajoy habrá de trasladar una fecha para la investidura. Los populares aseguran que este asunto no está “en el orden del día”. No obstante, es un punto clave para abrir diálogo con Rivera, y así lo asume el propio Rajoy. Desde Ciudadanos se exige al candidato popular que dé cuanto antes una fecha para la investidura. De hecho, esa es una pre-condición para el partido de centro, sin la cual no abrirá debate sobre los otros seis requisitos.

La mayoría de dirigentes coinciden en que es necesario concretar cuanto antes una fecha y se muestran convencidos de que el presidente en funciones la dará a conocer cuanto antes. La mayoría de fuentes consultadas son también partidarias de que la votación en el Congreso no se retrase, y menos de que se plantee después de las autonómicas del 25 de septiembre como se había sugerido.

En el PP se preparan para una negociación «compleja». El propio Rajoy ha avisado a los suyos de que las conversaciones con Rivera requieren superar aún varias fases y recuerda que el único apoyo de Ciudadanos no es suficiente para desbloquear la investidura.