El PP exige que la directora de la Mujer explique si censura a Iglesias por secuestrar la tarjeta de Dina
Quiere que Beatriz Gimeno aclare si considera admisible la explicación del vicepresidente de que no le dio la tarjeta para protegerla porque era una "mujer de veintipico años"
El PP quiere que la jefa del Instituto de la Mujer, Beatriz Gimeno, explique si censura a Pablo Iglesias por haberse quedado con la tarjeta de Dina Bousselham en su poder durante cuatro meses. Quiere que Beatriz Gimeno exponga si le parece bien que no devolviera esa tarjeta pese a saber que contenía fotos íntimas de ella. Y que el adalid feminista aclare si considera admisible la explicación del vicepresidente del Gobierno, que ha afirmado que no le dio la tarjeta para protegerla porque era una «mujer de veintipico años». El PP quiere que todo ello lo explique Gimeno en sede parlamentaria y que lo haga en la «Comisión de Igualdad».
El PP ha solicitado ya la comparecencia. La de «Dña. Beatriz Gimeno Reinoso, directora del Instituto de la Mujer y para la Igualdad de Oportunidades», dependiente del «Ministerio de Igualdad».
Con el motivo oficial de «analizar las acciones y protocolos previstos desde el Instituto de la Mujer y para la Igualdad de Oportunidades para la prevención del acoso en el entorno laboral, enmarcado dentro de los objetivos del Pacto de Estado contra la Violencia de Género en aplicación del Convenio del Consejo de Europa sobre prevención y lucha contra la violencia contra las mujeres y la violencia doméstica (Convenio de Estambul)», tal y como recoge la solicitud oficial de comparecencia presentada en el «Palacio del Congreso de los Diputados, a 6 de julio de 2020».
Pero esa comparecencia tendrá regalo. Porque el PP cree que debe dar explicaciones sobre la actitud de Pablo iglesias con respecto a Dina Bousselham. Especialmente a la vista de los comentarios previos expuestos por Gimeno en otros casos. Y uno de ellos, el caso Iveco, donde Gimeno fue especialmente crítica con las apropiaciones de imágenes o vídeos de contenido sexual de mujeres.
Hay que recordar que Pablo Iglesias «recibió» la tarjeta del móvil de Dina Bousselham con fotos íntimas y, «en lugar de sentir la más mínima empatía por/con ella, ir a decirle que no se preocupe, denunciar a quien lo haya enviado, enfadarse con sus compañeros» hizo «lo contrario a todo eso»: se quedó la tarjeta y se la devolvió cuatro meses después y destruida, según la primera declaración judicial de la propia Dina.
Caso Iveco
Pues bien, como ha publicado OKDIARIO, todos los entrecomillados de este párrafo reflejan la actitud que Beatriz Gimeno -ahora directora del Instituto de la Mujer, y en mayo de 2019 (cuando escribió este artículo) diputada autonómica de Podemos- censuró con dureza por formar parte del plan de los machistas para lograr la «cosificación» de la mujer.
Gimeno expuso su artículo en la publicación Contexto y Acción el 31 de mayo de 2019 a raíz del caso Iveco: «El suicidio de una trabajadora de Iveco ante la difusión de un vídeo suyo de contenido sexual», tal y como explicaba el propio artículo.
Allí Gimeno, que aún no era la número 1 del Instituto de la Mujer, pero ya era diputada de la formación morada en la Asamblea de Madrid, criticó con dureza «la cosificación extrema», una actitud que, según la ahora directora del Instituto de la Mujer, incluye esa apropiación de imágenes sexuales o íntimas.
Su argumentación, de hecho, salvo en una parte -la de la distribución posterior del vídeo que se dio en el caso Iveco-, podría ser perfectamente aplicado a la actitud de Pablo Iglesias con Dina Bousselham: se quedó cuatro meses con su tarjeta del móvil, con fotos íntimas, y no se la devolvió hasta que el escándalo creció y, en ese momento, se la entregó destruida, según la primera declaración de la propia Dina en sede judicial y ante el juez García Castellón.
La argumentación es la siguiente: «¿Qué parte de la identidad masculina se pone en funcionamiento cuando un hombre ‘normal’ recibe el vídeo sexual de una compañera de trabajo y, en lugar de sentir la más mínima empatía por/con ella, ir a decirle que no se preocupe, denunciar a quien lo haya enviado, enfadarse con sus compañeros, negarse a compartirlo, hace lo contrario a todo eso? Supone, sobre todo, que una parte de la identidad masculina de la mayoría de los hombres, una parte muy importante, se construye sobre la negación de la humanidad de la otra, especialmente, cuando esa otra está en un contexto sexualizado».
Iglesias, efectivamente, «recibe» las fotos íntimas «de una compañera de trabajo y, en lugar de sentir la más mínima empatía por/con ella, ir a decirle que no se preocupe, denunciar a quien lo haya enviado, enfadarse con sus compañeros», hizo «lo contrario a todo eso». Se quedó la tarjeta porque, según las propias palabras del vicepresidente: «Imagínese lo que supone para una mujer de veintipico años saber, que esas fotos íntimas suyas acaban en manos de OKDIARIO, de Eduardo Inda, de Villarejo. Yo examino el contenido y veo el contenido de lo que hay, y tomo una decisión, que es no someter a Dina Bousselham a más presión».