El portavoz del PSC se deja el micro abierto al concluir el Pleno de Lérida: «¡A tomar por culo!»
El PSC se ha visto obligado a pedir disculpas públicamente, después de que su portavoz en el Ayuntamiento de Lérida, Jaume Sellés, exclamara al concluir el Pleno municipal: «¡A tomar por culo!».
El alcalde de la localidad, Miquel Pueyo, puso fin con estas palabras a la sesión que se había celebrado de forma telemática, para evitar el riesgo de contagio del coronavirus: «Mucha suerte, mucha salud y les agradezco el esfuerzo y la intensidad con la que hemos afrontado el desarrollo de este Pleno. Se levanta la sesión, gracias».
Por encima de sus palabras, se escuchó con toda claridad la exclamación del portavoz socialista, Jaume Sellés, que permanecía conectado desde casa y había olvidado desconectar su micrófono: «¡A tomar por culo!». Esta expresión fue subrayada por las risas de otros concejales.
Después de que trascendieran los hechos, a través de las redes sociales, el PSC de Lérida se ha obligado a difundir este mensaje, en el que pide disculpas por lo sucedido: «El grupo del PSC y su portavoz, Jaume Sellés, quieren pedir disculpas por la expresión que se ha escuchado a micrófono abierto al concluir el Pleno. Se trataba de una expresión espontánea que no se dirigía a nadie, pero reconocemos que ha sido desafortunada».
El portavoz del PSC en el Ayuntamiento de Lérida, Jaume Sellés, ha sido secretario general del sindicato Comisiones Obreras (CCOO) en la comarca de Terres de Lleida durante cerca de dos décadas. También ha sido vocal del consejo de administración de la empresa pública ADIF, en representación del mismo sindicato.
(1/2) El grup del PSC a la Paeria i el seu portaveu, Jaume Sellés, volem demanar disculpes per l'expressió que s'ha sentit a micro obert en acabar el ple. S'ha tractat d'una frase espontània que no es dirigia a ningú, però admetem que no ha sigut afortunada.
— PSC Lleida / ❤️ (@lleidapsc) July 31, 2020
Sellés publicó el pasado mes de septiembre un artículo en un diario local de la región, Segre, en el que afirmaba que la política es «un circo detestable», y se lamentaba de haber entrado en ella por «ingenuidad y egoísmo», haciendo pasar «un mal trago» a su familia.