Los pioneros de las caceroladas salen de Núñez de Balboa y llaman a manifestarse el sábado en Madrid
Los vecinos de la zona que protestaron en la calle contra la gestión de la crisis del coronavirus por parte del Gobierno han organizado una manifestación que tendrá lugar el próximo sábado 27 de junio en Madrid
Los vecinos de Núñez de Balboa, pioneros de las caceroladas contra la gestión de la crisis del coronavirus por parte del Gobierno, han organizado una manifestación que tendrá lugar el próximo sábado 27 de junio en Madrid.
La protesta comenzará a las 12 del mediodía y partirá desde la plaza de Gregorio Marañón. La marcha tiene previsto acabar sobre las 14:00 horas en la plaza de Neptuno.
Movimiento Civil Constitucionalista Núñez de Balboa ha sido el encargado de organizar y convocar la manifestación. Aquellos que comenzaron las protestas que rápido se extendieron por toda España, han decidido dar un paso más y tramitar la protesta que ya ha sido aprobada por la Delegación del Gobierno.
Para asistir han puesto como requisito que se acuda con mascarilla y se respete la distancia de seguridad. A diferencia de la convocada por Vox el pasado mes de mayo, que se realizó en coche debido a las circunstancias del estado de alarma, esta se hará a pie.
Sonsoles Queipo de Llano es una de las portavoces del movimiento y asegura que «está muy bien irse de bares porque somos muy sociales, pero no por serlo significa que los españoles no estén enfadados». «No dedicamos atención diaria al Gobierno porque no lo merece pero hay que seguir protestando», añade la joven. Además, asegura que «tenemos muy poca memoria» y que no se puede olvidar que «el Gobierno sigue ahí y sigue haciendo lo que le da la gana».
Los organizadores piden ahora voluntarios para poder llevar a cabo la protesta con total seguridad y han creado un correo electrónico para todos aquellos que quieran ayudar ([email protected] ).
Por el momento ningún partido político ha confirmado su asistencia, aunque los vecinos de Núñez de Balboa no lo descartan.
Caceroladas en Madrid
Los madrileños de la calle Núñez de Balboa y alrededores han protestado prácticamente a diario contra el Gobierno de Pedro Sánchez.
En medio de un fuerte dispositivo policial, con una docena de furgonetas de las Unidades de Intervención Policial (UIP) de la Policía Nacional y un centenar de agentes desplegados entre la calle Ramón de la Cruz y la calle Goya, los vecinos de esta zona de la capital han sacado diariamente sus cacerolas y desde sus balcones y a pie de calle las han hecho sonar contra el Ejecutivo socialcomunista al grito de «Libertad, libertad», «Gobierno, dimisión» y «Comunistas, narcoterroristas».
El movimiento ha sido frecuentemente criticado por la izquierda, que lo ha considerado una protesta de «los ricos». Tanto es así que políticos como el portavoz parlamentario de Podemos, Pablo Echenique, llegó a difundir un bulo sobre la presencia de palos de golf durante las caceroladas. Algo que, tal y como se demostró, era falso. De hecho, el objeto fue confundido con un palo de escoba con el que uno de los asistentes golpeaba una señal de tráfico para hacer ruido.
Homenaje a las víctimas
El pasado fin de semana tuvo lugar un homenaje a las víctimas del coronavirus. Un centenar de personas se reunieron el domingo en el Paseo de la Castellana de Madrid en memoria a los que ya no están. El encuentro fue convocado por la Plataforma Unidos que se aseguró de que se mantuviese la distancia de seguridad en todo momento.
Hacia las 12:oo del mediodía, un grupo de personas acudieron a la calle madrileña con el único objetivo de recordar a los fallecidos por el Covid-19 y homenajear también a todos aquellos que han sido afectados de alguna manera. El encuentro dio comienzo con la música de un guitarrista que acudió desde Galicia para acompañar el acto con canciones. La canción de ‘A tu lado’ de Los Secretos abrió la reunión.
Después, varias personas que habían perdido a un familiar durante la epidemia ofrecieron su testimonio. Primero, una joven que contó que en su familia «todos quedaron contagiados» y que, finalmente, su abuelo no pudo superarlo. También contó su historia una mujer, madre de cuatro hijos, que ha perdido a su marido. «Pensé que íbamos a caminar siempre juntos de la mano», lamentaba emocionada mientras compartía escenario con sus pequeños.
El acto, a diferencia de la manifestación del próximo sábado, no tuvo carácter reivindicativo sino que se centró principalmente en las víctimas. Los organizadores repartieron mascarillas con la bandera de España y un crespón negro y se aseguraron de que se mantenía en todo momento la distancia de seguridad. Lo hicieron pintando crespones en el suelo donde los asistentes permanecieron durante todo el encuentro.