Los padres separatistas del colegio de Canet crean una web para señalar al niño de las clases en español
El señalamiento al que se está sometiendo al niño de 5 años de Canet de Mar y a su familia por reclamar su derecho a recibir clases en castellano llega incluso desde los propios padres del colegio. Después de que se llegase a proponer apedrear su domicilio, la propia Asociación de Padres y Madres (AMPA) del centro ha creado una plataforma web desde la que hostigar al menor y a sus padres al considerar que la lengua vehicular de la escuela es el catalán. Acusa a los padres y al niño afectado de «motivación política», y asume que el castellano ya se habla «en el patio».
«Varias familias del grupo de la clase afectada y del resto de la escuela, con orígenes lingüísticos diversos (más allá del binomio castellanohablante-catalanohablante) han empezado a organizarse para mostrar su desacuerdo con este ataque a la inmersión lingüística», advierten desde esta plataforma auspiciada por el AMPA del centro.
Los padres del Turó del Drac, como se llama la escuela donde este viernes habrá una manifestación contra el niño y su familia justo a la hora que terminan las horas lectivas, alegan que esta sentencia que obliga a dar el 25% de las clases en castellano rompe «la plena normalidad de la escolarización en catalán». Así lo defienden en un manifiesto que han publicado y del que han enviado copia al Departamento de Educación de la Generalitat de Cataluña.
«Diferentes intereses políticos (mediante denuncias y ruido mediático) han llevado a los tribunales a dictaminar sentencias que establecen cuotas de lenguas vehiculares a la docencia», aseguran, mientras señalan a los culpables: «Esta sentencia surge a raíz de la denuncia de una familia de dicho grupo clase que pedía un 50% de las horas lectivas en lengua castellana».
«Ya hace casi 30 años que las escuelas de Cataluña practican la inmersión lingüística en las aulas. La introducción de la inmersión ha permitido que la escolarización de los niños proporcione las competencias académicas esperadas, la integración social y cultural deseables para toda la ciudadanía y garantizar la posibilidad de una plena educación en catalán después de largos años de marginación y criminalización», defienden.
«Motivaciones políticas»
Los autores del manifiesto acusan a los padres del niño señalado de tener «motivación política» tras su denuncia y estar afectando a la «igualdad de oportunidades del alumnado». Defienden, además, que empezar a dar una de cada cuatro horas en castellano «tiene efectos negativos sobre el proyecto pedagógico» y que «cambiar las dinámicas a medio curso» perjudica al grupo.
En cambio, aseguran que «la lengua castellana está bien presente en la vida social escolar» del centro. Y citan, textualmente, que se usa en «aulas y patios». Paradójicamente, la plataforma asegura que quiere dejar patente su «rechazo a cualquier tipo de violencia y señalamiento, preservando por encima de todo los intereses de los niños de la escuela».
Finalizan su manifiesto animando «al resto de familias y ciudadanía en general a sumarse a las actividades y reivindicaciones que proponemos». La primera, la manifestación a la puerta del colegio a la salida de clase que tendrá lugar este viernes.