Arnaldo Otegi, el socio de Sánchez, mete en la dirección de su partido al último jefe de ETA
El partido legatario de ETA seguirá "comprometido con el proceso de liberación nacional vasco"
El partido de Otegi invita al último jefe de ETA para exigir a Sánchez que vacíe las cárceles
Bildu recibe con aplausos al jefe de ETA Mikel ‘Antza’ antes de declarar por el asesinato de Ordóñez
EH Bildu no es ETA, dicen los socialistas para blanquear a su socio parlamentario. Sin embargo, el ex jefe de ETA David Pla, el encapuchado que leyó el último comunicado de la banda terrorista en 2011, formará parte de la dirección de Sortu, el partido de Arnaldo Otegi que representa la espina dorsal de EH Bildu. Hay quienes consideran que se trata del pago de una deuda del partido a la banda.
El que fuera dirigente de ETA ha sido este miércoles propuesto por el Consejo Nacional de la formación para ser responsable del Marco de Orientación Estratégica (vicesecretaria tercera), dentro de un equipo formado por cinco mujeres y cinco hombres, que serán los encargados de dirigir el partido legatario del proyecto político de ETA. Tanto es así que el nuevo equipo directivo seguirá «comprometido con el proceso de liberación nacional vasco».
Sortu defiende el papel que, en su opinión, ha jugado Pla en la estrategia de abandono de la violencia: «David ha sido una de las personas clave en la apertura de este nuevo ciclo, fue uno de los protagonistas del cambio de estrategia», asegura el partido de Otegi.
El etarra llevaba años colaborando con el partido de Otegi, incluso en actos públicos. El pasado mes de junio participó en la asamblea de Sortu para exigir la libertad de los presos etarras porque «ya han pagado por el daño producido». Además, ya formaba parte de la dirección de Sortu en Navarra desde el año pasado.
David Pla (Pamplona, 1975) comenzó sus vínculos con ETA a través del terrorismo callejero, la denominada kale borroka, desde organizaciones juveniles como Jarrai. Luego pasó a Francia para integrarse en las filas de la organización.
Salió de la cárcel de Soto del Real hace año y medio, a pesar de que aún mantenía causas pendientes con la Justicia. Había sido detenido en Francia, junto a su pareja y también dirigente etarra Iratxe Sorzabal, en septiembre de 2015. Con ellos caía la última cúpula de ETA. Cumplió menos de cuatro años de prisión en Francia y quedó en libertad en abril de 2019. En 2020 volvió a ser detenido y entregado a España, pero actualmente se encuentra en libertad con medidas cautelares.
El fichaje de Pla es una muestra más de la connivencia de Sortu y EH Bildu con los miembros de ETA. Ayer, un mes después de que se comprometieran a mitigar «el dolor de las víctimas» y renunciaran a homenajear a los terroristas excarcelados, miembros de ambos partidos recibieron con aplausos y pancartas de apoyo al que también fuera jefe de ETA Mikel Antza a su llegada a los Juzgados de San Sebastián para declarar por videoconferencia por su implicación en el asesinato del teniente de alcalde de San Sebastián Gregorio Ordóñez (PP) el 23 de enero de 1995.