Ortega Lara recibe a las víctimas que se han manifestado en Mondragón contra el homenaje a Parot
El ex funcionario de prisiones José Antonio Ortega Lara, que sufrió 532 días de cautiverio en un zulo de ETA en Mondragón, ha querido mostrar este sábado su apoyo a la expedición de Voces contra el Terrorismo, presidida por el diputado de Vox Francisco José Alcaraz -también víctima de la barbarie etarra-, con motivo de su desplazamiento a dicha localidad guipuzcoana para hacer frente al homenaje de los batasunos al sanguinario Henri Parot.
Ortega Lara ha recibido a la expedición, que viajaba en varios autobuses, en una estación de servicio en Burgos, cuando ésta regresaba de su concentración en Mondragón en defensa de las víctimas del terrorismo y contra la «traición» del Gobierno de Pedro Sánchez. Según fuentes consultadas por OKDIARIO, los pasajeros de estos autobuses han aplaudido a Ortega Lara al ver que les estaba esperando allí en señal de agradecimiento.
En este punto, Ortega Lara se ha saludado con Francisco José Alcaraz y otras víctimas de la organización terrorista ETA. El ex funcionario de prisiones, según ha publicado el periodista Cake Minuesa en redes sociales, ha sacado incluso una sonrisa a los presentes al explicar así por qué no había estado con ellos en el País Vasco: «Me vais a perdonar que no haya ido a Mondragón pero es que ya estuve allí un año y medio… y no tengo buenos recuerdos», les ha comentado.
Horas antes, en la concentración de Voces contra el Terrorismo en Mondragón «en defensa de las víctimas», estuvieron presentes el propio Alcaraz, el presidente de Vox, Santiago Abascal, el secretario general del partido, Javier Ortega Smith, la parlamentaria vasca de la formación, Amaia Martínez, y un buen número de diputados nacionales, como Macarena Olona, Víctor Sánchez del Real, Georgina Trias, Mireia Borrás o Ángel López Maraver.
«Alimentar la serpiente»
Todos ellos se situaron tras la pancarta en la que podía leerse «Sois las voces de los asesinos. Nosotros las víctimas». Durante la concentración, la madre de Irene Villa, María Jesús González, dio lectura a un texto en el que, en referencia al Gobierno de Sánchez, dijo que ojalá «nunca se tenga que arrepentir de alimentar a la serpiente de ETA».
Por su parte, y en alusión a los actos convocados por Sare a favor del pistolero Parot -asesino de su hermano y sus dos sobrinas en la casa cuartel de la Guardia Civil en Zaragoza-, Alcaraz denunció este «homenaje promovido por etarras y avalado por quienes tenían la obligación judicial y moral de haberlo suspendido». El Gobierno de Sánchez no ha legislado ni tiene previsto hacerlo para impedir que se celebren estos actos en favor de asesinos.
Cuando la expedición de Voces contra el Terrorismo concluyó su concentración, se vivieron los momentos de mayor tensión, ya que los radicales lanzaron piedras, botellas, tornillos y otros objetos contra las víctimas, lo que obligó a la Ertzaintza a efectuar varias cargas.
Horas antes, la nave del zulo de Mondragón donde ETA secuestró a Ortega Larga entre 1996 y 1997 apareció con pintadas donde se podía leer: «¡Fuera fascistas. Dejar a Mondragón en paz!». El PP había convocado allí para este sábado un «acto de desagravio a las víctimas». Los populares han exigido a Sánchez que elija entre «estar con las víctimas o estar con los verdugos», con «los herederos de ETA».
El pasado junio, en una exposición del Centro Memorial de Víctimas del Terrorismo, Pedro Sánchez se hizo la foto en una reproducción del zulo donde ETA secuestró a Ortega Lara. En ese momento, al Ejecutivo socialcomunista apenas le restaban por trasladar unos cuantos presos etarras dentro su política de acercamientos como gesto a Bildu, partido que ha legitimado como socio.