Montero pide ahora «proteger» a las mujeres de sus violadores en libertad con pulseras telemáticas
La Ley del 'sólo sí es sí' ha provocado ya la rebaja de condenas a 188 agresores sexuales
Marlaska pone protección policial a la mujer a la que su violador excarcelado amenaza con «cortar el cuello»
La nº 2 de Montero se ríe a carcajadas de la excarcelación de violadores: «¡Se van oleadas a la calle!»
El Gobierno se niega a rectificar la Ley del sólo sí es sí, que ha provocado ya la rebaja de condenas a 188 agresores sexuales -al cierre de esta información- y 18 excarcelaciones pero sí ha tenido que activar medidas de urgencia ante sus fatales consecuencias. El Ministerio de Igualdad sigue defendiendo la utilidad de esta ley para «proteger» a las mujeres, pese a las múltiples advertencias de que la reducción de las penas provocaría una inevitable revisión de las condenas a agresores condenados. Ahora, ante el incesante goteo de salidas de prisión -y la previsión de que siga aumentando- la delegación del Gobierno contra la Violencia de Género ha dado instrucción de que se atiendan de urgencia, en un plazo de 24 horas, las peticiones judiciales de instalación de dispositivos de protección para las mujeres afectadas por la salida de prisión de sus agresores sexuales.
Así lo ha admitido la propia delegada, Victoria Rosell, en un acto para presentar la Estrategia Estatal para combatir las violencias machistas 2022-2025, un plan que se hace público en pleno repunte de asesinatos y mientras las rebajas de penas no dejan de aumentar.
Estos dispositivos están inicialmente contemplados para las mujeres víctimas de la violencia de género, aunque Igualdad pretende que, en los próximos meses, se apliquen también para casos de agresiones sexuales. Aprobados con orden judicial, permiten verificar el correcto cumplimiento por los inculpados de la prohibición de aproximación a una víctima. Suelen ser pulseras de pequeñas dimensiones y ligeras en el caso de los hombres y del tipo de un teléfono móvil, en las mujeres. Un centro de control especializado (COMETA), atendido por personas especializadas 24 horas al día, atiende las alertas producidas por el sistema y se comunica con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en caso de ser necesario.
Igualdad prepara un contrato para disponer de nuevos dispositivos para proteger a las víctimas de violencias sexuales que, sin embargo, no estará disponible hasta febrero de 2024.
En esta situación, Rosell ha admitido que, en diciembre, y «ante las noticias de reducciones de penas sorpresivas para las víctimas o algunas excarcelaciones inesperadas» dio la instrucción «de que se atiendan en 24 horas las peticiones judiciales de instalación de dispositivos a estas víctimas». Este recurso está «a disposición de las mujeres que puedan sufrir esta revictimización», ha abundado.
Riesgo
De forma implícita, Igualdad admite así el riesgo de su Ley del sólo sí es sí para decenas de mujeres cuyos agresores ven acortada su pena o, directamente, quedan en libertad.
Como ha avanzado OKDIARIO, el Ministerio del Interior ya ha tenido que poner protección policial a una mujer amenazada de muerte por su agresor, en libertad por la rebaja de su condena. La víctima ha tenido que huir de su localidad al recibir mensajes de su ex pareja del tipo, quien ha advertido con «serrarle el cuello».
En público, la ministra y otros cargos del Ministerio han defendido sin ambages esta ley, evitando pronunciarse sobre las excarcelaciones.
La semana pasada, la secretaria de Estado de Igualdad, Ángela Rodríguez Pam, sí lo hizo en un foro organizado por Podemos. La número 2 de Montero comentó entre risas la salida de prisión de los delincuentes sexuales. «De los creadores de las personas van a ir al registro para cambiarse de sexo todas las mañanas, llega ¡los violadores a la calle! ¡Miles, oleadas!», expuso esta alto cargo.
Sus declaraciones, adelantadas por este periódico, provocaron una enorme polémica, con peticiones de rectificación por parte del Partido Socialista y de dimisión desde el Partido Popular. Ella se ha defendido hablando de «manipulación» pese a la evidencia de las imágenes.