Las mentiras de Espinar: pidió permiso para vender su VPO por 140.000€ y la puso en venta por 186.000€
El senador de Podemos Ramón Espinar pidió autorización a la Comunidad de Madrid para vender su VPO por 140.000 euros, la puso a la venta por 186.000 euros («precio no negociable»)… y finalmente escrituró la operación ante notario por 175.726 euros. Las cuentas no salen.
Las explicaciones que Ramón Espinar ofreció el miércoles en rueda de prensa no han hecho sino arrojar más sombras sobre la operación especulativa que realizó con una vivienda de protección pública que debería haber sido destinada a una familia sin recursos.
En su rueda de prensa, el portavoz de Podemos en el Senado aseguró que vendió su piso por 175.000 euros, porque éste era el precio fijado oficialmente por la Comunidad de Madrid.
Pero lo cierto es que, según ha desvelado la Cadena Ser, Espinar solicitó el 20 de agosto de 2010 a la Dirección General de Vivienda de la Comunidad de Madrid autorización para vender su casa por un precio muy inferior: 140.343 euros.
Puso el piso a la venta por 186.000 €
La CAM aprobó la operación porque el precio fijado no superaba el límite legal permitido. Acto seguido, Espinar comunicó a la promotora Vitra, vinculada a Comisiones Obreras (CC.OO.), su intención de vender el piso «por el precio máximo legal permitido por la Comunidad de Madrid».
Y sin embargo, el 18 de octubre del mismo año, Ramón Espinar puso a la venta su piso en un conocido portal inmobiliario por un precio muy superior: 186.000 euros («precio no negociable», especificaba el anuncio).
«No podía escriturar el precio real»
La cadena Cope ha entrevistado hoy a un cliente que se interesó por comprar la vivienda. Según ha desvelado, Espinar le advirtió que no podía escriturar la venta por el precio real, ya que se trataba de un piso de protección pública que tenía un precio oficial fijado por Ley, por lo que «había que negociar la diferencia». Cuando el cliente le comentó que debía consultarlo con un abogado, Espinar dio marcha atrás y no volvió a contactar con él.
Tras encontrar a otro comprador, la operación se escrituró finalmente el 15 de abril de 2011 ante notario por un precio de 175.726 euros. De esta cantidad, el comprador entregó dos cheques por importe de 10.000 euros (a modo de señal) y 73.816 euros, además de asumir el crédito hipotecario que estaba pendiente por importe de 90.870 euros.
¿Una hipoteca sin tener una nómina?
Ramón Espinar había comprado su piso de protección pública pocos meses antes, en marzo de 2010, a la cooperativa Vitra (vinculada al sindicato Comisiones Obreras) por 146.224 euros. De esta cantidad, pagó 52.000 euros de entrada (un dinero que, asegura, le prestó su familia) y se subrogó el préstamo hipotecario concedido por el BBVA a la promotora por un importe de 94.224 euros.
Espinar aún no ha aclarado cómo consiguió que el banco BBVA le concediera la hipoteca para comprar el inmueble, cuando en aquel momento sus únicos ingresos se reducían a una beca de estudios de 450 euros al mes. Algo que sólo parece posible si el actual senador de Podemos presentó el aval de su padre, el ex presidente socialista de la Asamblea de Madrid Ramón Espinar Gallego, que en aquel momento era miembro del consejo de administración de Caja Madrid. Durante el juicio que está celebrando la Audiencia Nacional, la Fiscalía solicita para Espinar Gallego una pena de cuatro años de cárcel por haberse gastado 178.399,95 euros con su tarjeta black de Caja Madrid.
¿Declaró a Hacienda el préstamo familiar?
Los préstamos entre familiares están exentos de tributar, pero deben ser declarados ante la Agencia Tributaria mediante el modelo 600 del Impuesto de Transmisiones y Actos Jurídicos Documentados. El aspirante a secretario general de Podemos en Madrid no ha hecho público este documento, que acreditaría que cumplió la obligación de declarar el préstamo de 50.000 euros que le hizo su familia («mi madre, mi abuela y mi padre», aseguró en la rueda de prensa) para poder pagar la entrada del piso.
Le adjudicaron el piso ‘a dedo’
En su rueda de prensa, Ramón Espinar aseguró que siendo estudiante se había apuntado al Plan Vivienda Joven de la Comunidad de Madrid. Aunque no consiguió su VPO mediante el sorteo oficial realizado por el Ayuntamiento de Alcobendas, entró en el cupo del 15% de los pisos que la promotora tenía de libre disposición.
Pero también es falso. La Comunidad de Madrid ha indicado hoy que el nombre de Ramón Espinar nunca ha figurado entre los inscritos en el plan Vivienda Joven. Tampoco podía acceder a la VPO en condiciones normales, ya que el reglamento del Ayuntamiento de Alcobendas para la adjudicación de viviendas de protección pública establece que todos los solicitantes deben acreditar que llevan al menos tres años residiendo o trabajando en el municipio. Por supuesto, Espinar no cumplía ese requisito.
Sí se sabe, en cambio, que uno de los representantes legales de la cooperativa Vitra que le adjudicó el piso, Antonio Rey de Viñas, está imputado por gastarse 191.500 euros con la tarjeta black que tenía como miembro de la comisión de control de Caja Madrid. Como el padre de Ramón Espinar, con el que coincidió en la entidad. Y el alcalde de Alcobendas que cedió a Vitra el suelo municipal para construir esta promoción de viviendas protegidas, el socialista José Caballero, también formó parte del consejo de administración de Caja Madrid durante 12 años, desde 1995 a 2007.
La promotora desmiente a Espinar
Del mismo modo, en su rueda de prensa Ramón Espinar aseguró que no le quedó más remedio que poner a la venta su vivienda protegida porque no podía seguir pagando la hipoteca.
También en este caso, le ha desmentido el actual presidente de la cooperativa Vitra, Francisco Naranjo: ha explicado que si Espinar no podía pagar la hipoteca podía renunciar a su vivienda y la cooperativa le habría devuelto el dinero abonado. En su lugar, Espinar prefirió especular con su vivienda protegida: la puso a la venta sin haber llegado a vivir en ella y así obtuvo un beneficio de al menos 19.000 euros.