La juez imputa al PP por destruir los ordenadores y Bárcenas se persona como acusación particular
La titular del Juzgado de Instrucción número 32 de Madrid ha imputado al PP y a su tesorera, Carmen Navarro, en la causa abierta por la destrucción de los ordenadores que utilizaba Luis Bárcenas.
La magistrada ha citado a Navarro a declarar como investigada –el término que sustituye ahora a la palabra imputado– el próximo 4 de febrero.
También deberán prestar declaración, en este caso como testigos, su secretaria, Estrella Domínguez, el jefe de seguridad del PP cuando ocurrieron los hechos, Antonio de la Fuente, y el asesor jurídico del partido, Alberto Durán.
Por su parte, el propio Luis Bárcenas ha solicitado personarse en la causa como acusación particular en su condición de «perjudicado», representado por su letrado Francisco Maroto. De hecho, Bárcenas ha sido citado a declarar como testigo el día 3, pero ha solicitado que se cambie la fecha de la comparecencia.
Esta es la segunda causa en la que han sido imputados la gerente y tesorera del PP, Carmen Navarro, y el asesor jurídico del partido, Alberto Durán. Ambos deben declarar como «investigados» (ahora se dice así) ante el Juzgado de Instrucción número 2 de Madrid, por las presuntas irregularidades cometidas en el despido de Bárcenas.
La Audiencia Provincial de Madrid ordenó el pasado día 15 reabrir la causa al estimar los recursos presentados por IU, la Asociación Justicia y Sociedad, Los Verdes, así como UPyD contra la decisión de sobreseimiento provisional.
En su resolución, los magistrados de la Audiencia consideraron que «el archivo provisional se adoptó sin practicar diligencia de investigación alguna» sobre los hechos, lo que le impide disponer de información contrastada para dirimir el caso.
Y advirtieron que «lo jurídicamente decisivo es averiguar la titularidad de los ficheros almacenados en los soportes destruidos», así como hallar a los responsables que destruyeron los discos duros de los ordenadores.
De este modo, la Sala pretende que se averigüe «quién, en la organización del PP, ordenó o acordó la destrucción de los discos duros» utilizados por Bárcenas, en un momento en que «era público y notorio que el mismo estaba siendo sometido a investigación penal por graves delitos cometidos con ocasión del desarrollo de su actividad laboral».
Por su parte, desde el PP sostienen que la investigación demostrará que «los ordenadores en los que supuestamente trabajaba Bárcenas no contenían información puesto que, como él mismo dijo, cambió y se llevó el disco duro».
Los populares han indicado que la información que había en dichos ordenadores fue entregada en un pendrive al ex juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz.