Irene Montero acusa de homofobia a los barrios obreros en los que vivía antes de irse al casoplón de Galapagar

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La ministra de Igualdad, Irene Montero, en una de las fotografías realizadas para su última entrevista para la revista Vanity Fair.

Irene Montero ha vuelto a hacer gala, una vez más, de su falta de coherencia. La residente de Galapagar, una de las zonas con mayor nivel de renta de la Comunidad de Madrid, ha denunciado en un tuit la homofobia en los barrios obreros y los internautas le han tildado de «clasista». La ministra de Igualdad ha utilizado un fragmento del tráiler de ‘Pride’, una película de 2015, para denunciar las injusticias a las que se enfrentan las personas LGTBQ: «Claro que en los barrios obreros hay personas LGTBI. Les pasa que no les alquilan un piso por ser lesbianas. Que les dan una paliza por ser trans, que se burlan de ellos en el cole o en su curro», dice Montero desde la comodidad de su casoplón en una de las zonas más ricas de Madrid.

El mensaje sigue la estela de su pareja Pablo Iglesias, el vicepresidente, que usa las redes sociales para recomendar series y películas, aunque la pandemia, que todavía sigue azotando sin piedad al mundo entero, se haya cobrado ya la vida de más de 80.000 españoles. Pero en este caso, el mensaje de Montero se ha vuelto en su contra y ha provocado un alud de críticas en las redes sociales.

La película que utiliza Montero, ‘Pride’, es una brillante comedia inglesa estrenada en 2015 que relata la historia de un grupo de activistas por los derechos homosexuales en Reino Unido en los años de la ‘dama de hierro’, Margaret Tatcher.

La ministra de Igualdad pretendía, con su mensaje, reivindicar la anexión del movimiento feminista al movimiento por los derechos LGTBQ pero las redes le han recriminado que criminalice a los barrios humildes desde la comodidad de su casoplón. Muchos internautas le han preguntado a Montero si en su urbanización, a la que se mudó desde uno de esos barrios obreros que ahora criminaliza, existen estos problemas de intolerancia. Y otros muchos directamente le evidencian que la pobreza y la falta de infraestructura es un problema de mayor calado que la falta de tolerancia, que no es lo que define a estas zonas.

A las críticas a la ministra de Igualdad se ha sumado la escritora, y muy activa en Twitter, Lucía Etxebarría que ha tirado de ironía para poner en evidencia a Montero: «Cómo se nota que saliste de casa de tus papás para ir a vivir a un casoplón en Galapagar».

También políticos como Toni Cantó o Melissa Rodríguez, de Ciudadanos, se han sumado a las críticas:

Pero el varapalo mayor se lo ha llevado de mano de los ciudadanos de a pie que no han pasado por alto la falta de coherencia constante de la de Podemos.

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