Los funcionarios de prisiones estallan: «Sánchez compra móviles a presos y nos da mascarillas caducadas»

Los funcionarios de prisiones estallan contra la «ineptitud» de Pedro Sánchez. «Compra móviles a los presos pero nos deja sin mascarillas y, las que nos da, están caducadas», explica a OKDIARIO Jorge Vilas, portavoz de CSIF, que recuerda, además, que ya llevan «más de 300 bajas».

El Ministerio de Interior comprará varios centenares de móviles para los presos españoles, tal y como ha podido confirmar este periódico por fuentes ministeriales. Una realidad que crispa, y mucho, a los funcionarios de prisiones, que recuerdan que «darle esto a determinados presos es como darle una pistola a un mono» porque «pueden organizarse con más criminales».

«Nos  hemos pasado toda la vida persiguiendo los móviles y ahora se los proporcionan, es increíble»

El reparto de estos teléfonos móviles a presos se debe a la prohibición de los vis a vis. «Distribuirán móviles entre los reclusos para que teóricamente hablen con sus familiares, pero no lo podemos controlar», señala Vilas. «Nos  hemos pasado toda la vida persiguiendo los móviles y ahora se los proporcionan, es increíble. No tenemos personal para controlar eso, y ahora, con 300 bajas, menos», continúa el portavoz de CSIF.

Además, los funcionarios de prisiones recuerdan que, con al amparo del derecho a la intimidad de los presos, no pueden estar delante en sus comunicaciones, por lo que consideran que dar estos dispositivos a los delincuentes es «una auténtica locura y un despropósito». «¿Cómo vamos a controlar con quién hacen sus comunicaciones?», se pregunta Vilas.

«Hay dinero para comprar móviles pero nos dan mascarillas caducadas», insiste el portavoz de los funcionarios de prisiones. En este sentido, cabe recordar que en los centros penitenciarios hay inhibidores que tendrán que ser desconectados para que se produzcan tales comunicaciones, lo que dará vía libre también a los teléfonos que los presos puedan tener escondidos.

Sin mascarillas… o caducadas

«Hay mucho enfado porque no llega el material, los presos están nerviosos y los funcionarios llevan más de 300 bajas. Está creciendo el clima de crispación», señalan en CSIF, desde donde subrayan que, el hecho de que los funcionarios atiendan a los presos sin mascarillas «les crispa mucho». «Si ya la cárcel es complicada, con todo esto mucho más», explica.

Y es que las pocas mascarillas que están llegando a los centros penitenciarios repartidos por el Ministerio de Interior, están caducadas. «El Ministerio de Interior no está siendo nada receptivo», denuncian desde CSIF.