Los funcionarios denuncian el estado de los juzgados: «Hay dependencias con graves carencias»

Los trabajadores de la justicia madrileña han salido a la calle para protestar por sus condiciones laborales. Convocados por los sindicatos CSIF,  CC.OO. y STAJ, los funcionarios que trabajan en la administración de justicia de la Comunidad de Madrid han protestado ante la sede del juzgado de primera instancia de plaza de Castilla. Los trabajadores han denunciado la falta de personal y el estado de las sedes judiciales. «Hay dependencias con graves carencias», explica el portavoz de Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), Juan Carlos Ferreiro en una entrevista con OKDIARIO. Asimismo, los sindicalistas afean la falta de personal que tiene la administración judicial en Madrid.

«Llevamos desde 2016 con 550 puestos de trabajo sin cubrir, esto supone el 9% de la plantilla y ha supuesto una saturación de procedimientos increíble», explica la portavoz de Comisiones Obreras (CC.OO.), Feli López. El resto de sindicalistas también coincide con López evidenciando así que la falta de  personal para atender trámites judiciales está obstruyendo la administración. Además, esta carencia de recursos humanos suficientes ha sobrecargado con más trabajo a la plantilla llegando incluso a afectar a la salud de algunos funcionarios. «Tenemos muchas bajas por ansiedad», explica el portavoz del sindicato de Trabajadores de Administración de Justicia (STAJ), Alberto García en una conversación con este medio.

La falta de trabajadores ha hecho que ciertos trámites se dilaten en exceso. «Los juzgados están atascados», asegura el portavoz del sindicato de Trabajadores de Administración de Justicia (STAJ), Alberto García. Y es que la situación ha llegado incluso a que juzgados como el 101 bis, que se encarga de las reclamaciones hipotecarias, este resolviendo expedientes de 2018. De este modo, queda latente que la justicia lleva años de retraso.

SEDES OBSOLETAS

A la falta de personal y sobrecarga de trabajo también se une el estado obsoleto de las sedes judiciales. El Gobierno de la Comunidad de Madrid ha puesto en marcha un plan de modernización de estas instalaciones precisamente para acabar con estos lugares arcaicos. Se trata del denominado Plan Justicia 21×21, que tiene como objetivo modernizar las infraestructuras de los 21 partidos judiciales de la región capitolina. Esta actuación, puesta en marcha por el Ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso, cuenta con un presupuesto de 100 millones de euros a ejecutar durante el cuatrienio de 2019 a 2023. Sin embargo, las obras están tardando en llegar a algunas de estas sedes. También el proyecto de Ciudad de la Justicia, que tratará de unificar las sedes judiciales en un amplio complejo ubicado en el barrio de Valdebebas, parece ser que está lejos en el tiempo de ser una realidad.

Una de las dependencias judiciales que más necesita estas mejoras es precisamente el juzgado de primera instancia de plaza de Castilla. Este inmueble alberga también el decanato de los juzgados de Madrid y los juzgados de vigilancia penitenciaria. Allí dentro, las salas de espera cuentan con sillas sin patas o carritos con enseres que obstruyen los pasillos. Asimismo, también cartones con celo tratan de sujetar cerraduras rotas y los baños tienen azulejos que se caen a trozos.  «No entró jamás del asco», explica una abogada que trabaja en estos juzgados madrileños.

Pero el juzgado de plaza de Castilla no es un caso aislado en España. Otros juzgados repartidos por la geografía española también yacen en condiciones deplorables. Oficinas sin ventilación y calabozos sin el 100% de los recursos son habituales en las dependencias judiciales del país. Pero si algo es protagonista en las sedes españolas es la gran cantidad de papel que invade estas oficinas que, poco a poco, están tratando de digitalizarse. Incluso, hay trabajadores que transportan una amplia cantidad de folios en carros de la compra, bolsas de basura y maletas de ruedas.

La obsolescencia de estas sedes judiciales es una queja recurrente entre los trabajadores de esta administración. También la paulatina digitalización de la institución es una asignatura pendiente. A todo esto se une el déficit de plantilla que existe entre estos funcionarios que ya han pedido al Gobierno regional que tome cartas en el asunto. Los representantes sindicales han pedido que se rellenen las plantillas para evitar así la saturación en sus puestos de trabajo. «Queremos dar un buen servicio a la ciudadanía», asevera el portavoz de CSIF, Juan Carlos Ferreiro en una entrevista con este medio.