Sanidad no tiene un plan de contingencia para los refugiados sirios
El ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad no sabe todavía como va a gestionar la llegada de casi 15.000 refugiados sirios, que se integrarán en nuestro país en virtud del acuerdo alcanzado con la Comisión Europea. España es el tercer país que más receptores tendrá, sólo por detrás de Francia y Alemania. Los refugiados proceden de Hungría, Italia y Grecia, países que han servido de vía de escape para los sirios que huyen de la guerra permanente impulsada por el presidente Bashar al-Asad.
Según ha podido saber Ok diario, los técnicos del departamento que dirige Alfonso Alonso no han recibido todavía instrucciones para elaborar un plan de contingencia. Fuentes del ministerio explican que todo está en manos de la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, que preside una comisión interministerial para gestionar la crisis de los refugiados. En las reuniones, que comenzaron la semana pasada, están –además del ministro de Sanidad- el de Interior, Jorge Fernández Díaz, y la ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez.
El volumen de llegadas es muy importante, sobre todo si se compara con las cifras que se barajaban el pasado mes de julio, cuando España aceptó recibir 2.700 refugiados. Con el nuevo reparto, España deberá asumir el 12,4% del volumen total que ha sido decidido en el seno de la UE, lo que hace necesario diseñar un programa integral en todos los campos, especialmente en el sanitario.
En opinión de Carmen Flores, presidenta de la Asociación El Defensor del Paciente (ADEPA), es imprescindible realizar un censo de los inmigrantes para evitar una crisis sanitaria. En esta línea reclama realizar fichas médicas de los refugiados para poder atenderles de forma adecuada, así como reforzar los hospitales, centros de salud y servicios de Urgencias.
“Hemos conocido a través del ministro de Interior que el Gobierno está preocupado por la posible llegada de terroristas y que se va a realizar un censo para poder localizarlos antes de que se integren en nuestra sociedad, pues del mismo modo hay que realizar un censo médico para evitar una crisis sanitaria. Muchos de los refugiados llegarán con carencias alimentarias y enfermedades que deben ser tratadas”, indica Flores.
El problema puede ser aún mayor si se confirman las previsiones del ministerio del Interior que espera recibir unas 17.000 solicitudes de asilo adicionales –la mayoría de origen sirio- fuera del reparto que ha realizado la UE. Estaríamos hablando entonces de más de 32.000 personas. España ya ha pedido a Bruselas dinero para poder atender a estos inmigrantes “y que no se vean abocados a caer en manos de las mafias”. En todo caso la palabra que más se escucha en los pasillos ministeriales es “incertidumbre”, como casi todo lo que se decide en el seno de la Unión.