Enchufismos, listas de espera y camas en los pasillos empujan al Gobierno de Puig al precipicio
No hay semana en la que la Generalitat Valenciana que preside Ximo Puig no tenga una polémica relacionada con la labor que está realizando la consejera de Sanidad, Carmen Montón, una de las políticas del PSOE que más ha apoyado a Pedro Sánchez para que lidere el partido. En esta ocasión ha sido Ciudadanos el partido que ha enmendado la plana a Puig en el Parlamento autonómico, criticando el trabajo de Montón y los escándalos que han protagonizado varios de sus altos cargos, todo ello acompañado por una mala gestión de la Sanidad valenciana.
Esta critica en las Cortes regionales se produce justo ahora que se plantea la posibilidad de que Ciudadanos sea la formación la que se apoye el Partido Socialista de Valencia (PSPV-PSOE), en lugar del actual acuerdo con Compromís y Podemos (el famoso Pacto del Botánico). Y el mayor escollo para que socialistas y el partido que dirige Albert Rivera puedan caminar juntos es Carmen Montón.
El portavoz de Ciudadanos en el Parlamento Valenciano, Alexis Marí, le reprocha a Puig “el caos y el desastre absoluto y total”en el que está inmersa la consejería de Sanidad y ha centrado su ataque en la gestión de Montón que “sigue con su obsesión sectaria de revertir un modelo público–privado por oposición a todo lo privado sin fijarse en los resultados”, en referencia a su decisión de poner fin de forma discrecional y arbitraria la concesión al Hospital de La Ribera, utilizando este caso como el modelo a seguir en política sanitaria en la región.
Además, Marí denuncia que “en la consejería de Montón los altos cargos se creen que están por encima de la ley de incompatibilidades y no pasa nada”, en relación con los escándalos protagonizados por el subsecretario, Ricardo Campos y, en concreto, criticando “la forma de hacer política de algunos en el Consell: echar a los que están ahora para colocar a sus amigos”, en referencia a la bolsa de trabajo abierta por Sanidad y en la que, según el ex comisionado de Alzira, entrarían “todos nuestros familiares”.
El portavoz de Ciudadanos apelado al “sentido común” y a la “honradez” de Ximo Puig para detener el tsunami de escándalos en Sanidad que está minando al Gobierno valenciano: “President, usted es una persona decente, pero el movimiento se demuestra andando. No permita lo que está pasando».
Ciudadanos y diputados del PSPV piden el cese de Montón
Tal como ha avanzado OKDIARIO, desde las filas internas del PSPV-PSOE se está recomendado a Puig que sustituya a la consejera de Sanidad. A los casos de enchufismo y a la radicalidad de Ricardo Campos (que llama “tropa” a los trabajadores de los hospitales y “parásitos” a las empresas que los gestionan” se suman las acusaciones del sindicato CSIF, que considera que existe prevaricación en algunas de las decisiones que ha adoptado Montón.
“Son cada vez más los que piensan que Sanidad es hoy una infección que amenaza con convertirse en la sepsis que mate al Gobierno de Ximo Puig si acaba con el foco del problema, la consejera Montón”, indican fuentes socialistas.
Nadie en el PSPV-PSOE comprende como Montón no ha cesado a Campos, especialmente después de que se descubriera que ha ocultado en su declaración de bienes como alto representante de la Generalitat que es propietario de una clínica privada de oftalmología desde hace más de 20 años en la que pasaba consulta y que ahora tiene alquilada a una sociedad para esta misma actividad.
“Aquí no hay puertas giratorias. Directamente, las puertas de Sanidad están abiertas a la trampa, el chanchullo, el engaño, el gasto sin control y el enchufe múltiple. Y lo más sorprenden es que no pasa nada. El Gobierno de la Transparencia se vuelve cada día más opaco y no importa la ética. Tampoco la estética”, indican fuentes del sector privado valenciano.
Al que no ha podido salvar la consejera Montón es al ya ex comisionado de La Ribera, José Sanfeliú, que fue pillado in fraganti contando que tras la reversión del contrato de gestión del Hospital de La Ribera el objetivo era crear una bolsa de trabajo para “meter a familiares y amigos”.
Más de una veintena de enchufes en la consejería de Carmen Montón
El portavoz de Bienestar Social del PP valenciano, José Juan Zaplana, ha llegado a descubrir más de una veintena de enchufes en la consejería de Sanidad. Todo comenzó con la actual gerente del Hospital La Fe y exsenadora del PSC, Mónica Almiñana: el anuncio de su nombramiento se hizo antes de que se convocara el concurso para cubrir la plaza. Hasta CCOO ha denunciado que “la contratación a dedo es una práctica continuada en el equipo de Montón”.
A los escándalos y problemas políticos se suman los económicos y de gestión, tal como muestra el informe que valora la consecución de objetivos de la propia consejería que se había marcado en 2016. En concreto, Montón ha suspendido en muchas y muy importantes acciones que repercuten en la calidad del servicio sanitario que se presta a los ciudadanos.
Por ejemplo: el retorno de los pacientes a Urgencias al cabo de 72 horas, la cita en atención primaria en menos de 48 horas, la demora en primera consulta en el hospital y el centro de especialidades, así como el tiempo de espera en operaciones. En todos estos casos no se llegó al objetivo establecido el pasado año.
Se ha incrementado las listas de espera en más de 7.000 pacientes en un año y las urgencias de la mayoría de los hospitales públicos están saturadas. Es habitual ver fotografías en los medios de comunicación con pacientes en los pasillos del Hospital Clínico Universitario o del General, con techos rotos e instalaciones deficientes.