Diputados del PP se amotinan y plantan a Egea tras convocarles a Génova: «Debería haber dimitido ya»
La última maniobra del todavía secretario general del PP, Teodoro García Egea, ha sido otro fracaso. Esta mañana remitió un mensaje a diputados y senadores del PP para personarse esta tarde en tres tandas en la segunda planta de Génova (17.30, 18.30 y 19.30 horas). Sin embargo, según ha podido saber OKDIARIO de fuentes internas, hay parlamentarios que no han atendido este llamamiento y no se han presentado en la sede de Génova, ya que ni saben para «qué hemos sido convocados por la secretaría general, con qué intención» y sobre todo sostienen que García Egea «debería haber dimitido ya». Y todo ello, mientras se sigue celebrando el Comité de Dirección que arrancó a las 11 horas y que preside el jefe de la oposición, Pablo Casado. También han sido citados cargos provinciales afines.
Así, la guerra en el aparato también se ha trasladado al Grupo Parlamentario del PP en las Cortes. Las llamadas y citas exigiendo fidelidad a Pablo Casado no han cesado. Las ha coordinado la secretaría general de Teodoro García Egea. Y los diputados más cercanos y de teórica confianza de Pablo Casado han empezado ya a notar la llegada de una guerra que, hasta ahora, se circunscribía al aparato del partido y a la cúpula. Ahora se exige ya a los diputados que garanticen su fidelidad al presidente y que, por lo tanto, muestren en redes y en sus comentarios el descontento con la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.
Sin embargo, las fuentes consultadas señalan que sí habrían atendido la convocatoria a Génova si hubiera sido desde la Presidencia del partido, esto es, desde la oficina de Pablo Casado.
Hasta la fecha, Génova considera que el aparato mediático de Sol está ganando la batalla. Que el hecho de que Isabel Díaz Ayuso disfrute de un aparato administrativo como la Comunidad de Madrid le da primacía en los medios de comunicación y le permite divulgar mejor su mensaje.
Y la fórmula de cortar esta teórica ventaja ha sido empezar a reclutar diputados que estén dispuestos a mostrar su apoyo sin fisuras al presidente de la formación y su rechazo y culpabilización a la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso. El resultado no es una mitigación de la guerra intestina en el PP, sino todo lo contrario: la extensión de ese clima de enfrentamiento y división al Grupo Parlamentario.
Fuentes del PP en el Congreso de los Diputados han confirmado a OKDIARIO la presión y la exigencia de posicionamientos activos en redes sociales y en los comentarios. Las citas y llamadas están coordinadas por García Egea. Y se realizan sobre todo a los diputados más fieles al presidente Casado.
Distintos miembros del PP han señalado a este diario su malestar por la extensión de la tensión al Hemiciclo. «Venimos de cerrar las heridas de las primarias y ahora nos encontramos abriendo nuevas heridas entre compañeros», señala una de estas fuentes.
Impacto en el electorado
La pugna entre Génova y Sol está dejando maltrecho al Partido Popular. Pero ninguno de los diputados pasa por alto que, al margen de la tensión personal, esta guerra civil está golpeando en el flanco más sensible de cualquier partido: el voto.
Este lunes distintas fuentes del PP han reconocido a OKDIARIO su enorme preocupación por las encuestas que ya muestran un sorpasso de Vox sobre el PP. Y por la manifestación multitudinaria de partidarios de Ayuso el pasado domingo frente a Génova.
Y es que el recorrido electoral del PP en los últimos meses demuestra el tremendo impacto que la guerra intestina está teniendo entre el electorado. Desde que esa batalla soterrada estalló en público las expectativas electorales del partido han ido en retroceso. En sólo seis meses, el PP ha perdido 50 diputados, comparando con la encuesta de OKDIARIO del pasado agosto.
La cronología de esta crisis es también la de una caída electoral que lastra las aspiraciones del PP de llegar a La Moncloa. Durante meses, el partido se vio impulsado por el ciclón electoral desencadenado por Isabel Díaz Ayuso en la Comunidad de Madrid, disparando sus aspiraciones de gobernar. En agosto, los populares encaraban, con 133 escaños, un horizonte inmejorable, según la encuesta de Data10 para OKDIARIO. Con el apoyo de Vox, Casado parecía ir directo a la Presidencia del Gobierno.
Pugna irreversible
El centroderecha vivía momentos de gloria y Sánchez sus momentos más críticos, víctima del manejo de la crisis económica y social y de su propia ambición para mantenerse en el poder, gracias a separatistas y proetarras.
A finales de ese mes, la presidenta madrileña anunciaba su intención de liderar el partido en Madrid e instaba a Casado a convocar ya el congreso regional. El presidente del PP respondía unos días después metiendo en la carrera al alcalde José Luis Martínez-Almeida. Se desataba entonces una pugna irreversible entre Génova y la Puerta del Sol por el poder del PP madrileño.
Desde entonces, el partido no ha dejado de caer en los sondeos. Primero, de forma tímida y ahora, en plena guerra civil, con una debacle que impide al centroderecha desalojar a Sánchez del poder. La última encuesta de OKDIARIO sitúa al PP en los 83 escaños. Los populares sufren un golpe doble: son incapaces de sumar una mayoría con Vox y se ven sorpassados por los de Abascal.