Colau y Puigdemont acogen a los titiriteros de Carmena este verano
Los titiriteros de Carmena, imputados por delitos de enaltecimiento del terrorismo tras su representación en Madrid de la obra satírica, La Bruja y Don Cristóbal, tienen programas numerosas representaciones en distintas localidades catalanas, incluida la ciudad de Barcelona. La noticia de la actuación de los más que cuestionados titiriteros ha llegado al resto de los grupos políticos catalanes a través del cartel publicitario de la obra que ha hecho público el Ayuntamiento de la ciudad condal.
El cartel ha levantado la polémica ya que lleva el logotipo del Consistorio barcelonés que dirige Ada Colau y de la Generalitat de Cataluña que gobierna Carles Puigdemont. Lo que despierta las sospechas sobre una posible subvención de ambas instituciones a los titiriteros.
Como respuesta al cartel publicitario, el presidente del Grupo Municipal del PP en el Ayuntamiento de Barcelona, Alberto Fernández, ha remitido una carta a la edil podemita pidiendo explicaciones sobre si realmente han subvencionado la obra, si es así, de cuánto dinero público han destinado a esta compañía, y qué valoración hace el Ayuntamiento del contenido de la obra de los ‘Títeres desde abajo’.
«Es indigno»
Al estar presente el logotipo del Ayuntamiento en el cartel anunciatorio de dichas representaciones, Fernández da por hecho que hay algún tipo de «apoyo logístico o económico» por parte de las dos instituciones a la obra, por lo que ha pedido «la retirada inmediata» de cualquier tipo de refuerzo. “Es indigno que Colau ofrezca apoyo a los titiriteros imputados, sea tanto económico como logístico”, ha condenado el popular.
“Colau debe dar explicaciones sobre si el Ayuntamiento ha realizado alguna aportación económica y si desde el consistorio conocen el contenido de dicha actuación”, ha afirmado el popular.
Colau ya los defendió
En este sentido, Fernández ha criticado que “Colau ya disculpó, cuando no justificó, a aquella lamentable función de títeres en la que se mostraba una pancarta exhibiendo la problema ‘Gora Alka-ETA’, y se limitó a apelar a la libertad de expresión de esta compañía”.
Ada Colau defendía así la libertad de expresión frente a la condenada actuación de los titiriteros y pedía que «nos pongamos todos en la piel de estos chicos», en lugar de los que se sintieron ofendidos por la grotesca obra. Además la alcaldesa criticaba que ambos iban a «tener que lidiar con la maquinaria mediática sin escrúpulos de una derecha vengativa que no soporta la disidencia».
Pese a que la regidora afirmó por entonces que no le pareció de buen gusto la obra, ha decidido darles voz y facilitarles los medios a través del Ayuntamiento de Barcelona.
Tanto a la alcaldesa como al presidente de la Generalitat parece no importarles que el magistrado del Juzgado Central de Instrucción número 2 de la Audiencia Nacional, Ismael Moreno, ordenase la prisión incondicional para los dos titiriteros acusados de un delito de enaltecimiento del terrorismo, “por la comisión de un delito de enaltecimiento del terrorismo y de un delito cometido con ocasión del ejercicio de los derechos fundamentales y de las libertades públicas garantizadas por la Constitución”, según recoge el auto.