Los Mossos movilizan a todos los antidisturbios ante la inhabilitación de Torra
Toda la plantilla de la BRIMO, la Brigada Móvil, ha sido activada para el viernes.
La previsión en fuentes del Tribunal Supremo es que se anuncie el lunes próximo "como máximo".
Los Mossos de Esquadra están en máxima alerta ante la posibilidad de que la inhabilitación de Quim Torra como presidente de la Generalitat se adelante a esta semana. Según ha podido saber OKDIARIO, la totalidad de la plantilla de la Brigada Móvil (BRIMO), las fuerzas antidisturbios del cuerpo autonómico, ha sido convocada a su puesto este viernes. Fuentes de los Mossos señalan que la previsión que maneja «a día de hoy» el Departamento catalán de Interior es que el Tribunal Supremo haga pública su decisión «este mismo jueves o viernes». Fuentes del propio Tribunal Supremo hablan del «lunes, como máximo».
Fuentes de los Mossos confirman que, a día de hoy, no tienen un protocolo concreto para actuar en caso de que Torra se rebelara contra la decisión o hubiera incidentes. La previsión de los servicios de Información de los Mossos es, en todo caso, de «incidentes no muy graves», aunque otras fuentes consultadas recuerdan también que «estos grupos violentos independentistas son imprevisibles».
«O no tienen nada previsto nuestros mandos -comentan fuentes policiales- o simplemente no quieren que les pase como a Trapero con Puigdemont que se filtró el (supuesto) plan para detenerle en el 1-0». Lo máximo que esperan en esta ocasión es que el Comisario Jefe envíe un escrito, en cuanto se conozca la noticia, con las instrucciones habituales de actuar con «proporcionalidad, congruencia etc …».
¿Qué hara?
Si el Tribunal Supremo inhabilita a Quim Torra como presidente de la Generalitat, el fallo debe ejecutarse inmediatamente incluso aunque Torra anuncie recurso ante el Constitucional. La previsión en medios jurídicos es que sea apartado del cargo. Torra no ha desvelado si acatará o no la sentencia.
Fuentes de los Mossos creen que «hará algún tipo de show en Sant Jaume o en el Parlament para llamar la atención y salir en los medios» y recuerdan «que Torra siempre hace lo mismo: le dan arrebatos, los lleva al límite, pero cuando aparecen los Mossos se echa para atrás, como ocurrió con las pancartas». En el Parlament -comentan- «lo tiene más difícil, aunque se convoque sesión plenaria, porque el presidente de la cámara autonómica, Roger Torrent, de ERC, no le va a seguir el juego».
Sobre posibles incidentes, las fuentes policiales consultadas hablan de un «tono menor» porque «ese mundo está muy desanimando como se vio en la Diada y el Covid también les echa para atrás». Además, dicen, «Torra no tiene el carisma de otros».
El Tribunal Supremo vio la semana pasada el recurso presentado por Torra contra la condena de año y medio de inhabilitación que le impuso el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña por desobedecer a la Junta Electoral Central (JEC) en las fechas previas a las elecciones del 28 de abril de 2019. Torra se negó a retirar las pancartas en favor de los políticos condenados por el 1-O que colgaban de la Generalitat.
A la sesión del Supremo asistió el propio Torra, pero el apoyo que recibió a las puertas del tribunal fue frio y escaso: «No les tenemos miedo», dijo en referencia a los jueces. Ante la Sala de Lo Penal, su abogado insistió en el argumento de que Torra está sufriendo una «palmaria persecución política» que pretende apartarle «ilegalmente» de la Generalitat.
La probabilidad de que Torra sea inhabilitado es alta. La Fiscalía es favorable a confirmar la sentencia porque su decisión fue «contraria a las exigencias de neutralidad en periodo electoral que también obligan al presidente de la Comunidad Autónoma».
Los cinco magistrados del Tribunal Supremo que tienen que decidir el futuro de Torra son: Andrés Martínez Arrieta, Juan Ramón Berdugo, Antonio del Moral, Vicente Magro y Susana Polo. Los tres primeros fueron integrantes de la Sala que dictó la sentencia por el golpe de estado del 1-O en Cataluña.
Sin apoyo
Quim Torra fue colocado por Carles Puigdemont tras su huida a Waterloo (Bélgica) para no ser detenido por el 1-O. Pero, con los meses, Torra fue dejando de ser solo la sombra de Puigdemont en Barcelona y desligándose de él para querer ser algo políticamente por si mismo. Las diferencias entre ambos ahora son insalvables y se han materializado incluso en la creación de un nuevo partido al margen del PdeCat. Puigdemont no ha esperado ni al Supremo para inhabilitarle políticamente de facto al prohibirle por carta que convocara elecciones antes de la resolución del Supremo.
Si el Supremo inhabilita a Quim Torra, la sentencia se ejecutará y no podrá seguir ejerciendo el cargo. Ello le impediría disolver el Parlament y convocar elecciones. Fuentes del parlament señalan a OKDIARIO que ya se está buscando la fórmula para que Cataluña no entre en un periodo de interinidad. La fórmula -dicen- pasaría por convocar un pleno, preguntar si hay algún candidato alternativo y, en caso negativo, proclamar al vicepresidente Pere Aragonès, de Esquerra Republicana de Cataluña (ERC) como presidente interino para que, exclusivamente, convocara elecciones en dos meses.
El vicepresidente de la Generalitat, Pere Aragonès, de ERC, ha pedido a Torra (con quien está enfrentado) «consensuar la respuesta» a su posible inhabilitación para evitar que esta cuestión acabe derivando en una nueva «pelea» entre los dos socios de coalición, JxCat y ERC. Al final de todo esto, se vislumbran elecciones anticipadas.