Torra a los jueces del Supremo que decidirán sobre su inhabilitación: «No les tenemos miedo»

El presidente de la Generalitat, Quim Torra, tras la vista celebrada este jueves en el Tribunal Supremo, para ver el recurso que presentó su defensa a la sentencia que le inhabilita para el ejercicio de cargo público, se ha dirigido a los tres magistrados del alto tribunal que decidirán sobre su futuro político afirmando que «no les tenemos miedo». Aleja el escenario de una convocatoria electoral inminente, tal como él avisó, y exige al Parlament que defienda la autonomía tras su inhabilitación.

En una comparecencia institucional sin preguntas en la sede de la Generalitat en Madrid, donde ha llegado pocos minutos después de finalizar la vista entre gritos de ‘golpista’ de algunos transeúntes, Torra ha explicado que «he venido a Madrid para mirar a la cara a los jueces del Tribunal Supremo». El president ha estado dentro la sala pero como público, ya que ha sido su defensa, encabezada por Gonzalo Boye, quien ha defendido el recurso.

El jefe del Ejecutivo regional critica que «los magistrados del Supremo se erigen en propietarios de este Estado». Asegura que ha querido «explicarles que no tienen razón». Considera Torra que «vivimos sometidos a la arbitrariedad judicial más grande de los últimos años». El president opina que «hablamos de una democracia que en 2020 está a años luz de los estándares europeos y es derrotada en los tribunales europeos».

Quim Torra, que ha defendido su labor durante la pandemia, ha criticado que «la represión ha llegado demasiado lejos». Dice que «cada uno tiene sus prioridades, así demuestran cómo aman a una Cataluña que quieren esclava y a su gente». Él mantiene que «no dejaré de trabajar ni un minuto, hasta que lleguen a la irresponsabilidad más absoluta de inhabilitarme, no seré yo quien lleve a este país a una convocatoria electoral ahora».

El líder separatista ha vuelto a desafiar a las instituciones asegurando que «no esperaremos a ningún cambio en el Estado español para hacer una cosa sobre la cual tenemos derecho». Asegura, sobre la posible celebración de un nuevo referéndum o una nueva declaración unilateral de independencia que, «si una mayoría de catalanes quiere, lo haremos». Apunta que «no nos harán recular ni un centímetro».

Sin mirar al futuro, sin ningún anuncio importante sobre qué ocurrirá una vez sea inhabilitado, Torra avisa que «la vía del diálogo no es transitable». Un aviso también a sus socios de Esquerra Republicana que apuestan por esta opción como vía para solucionar el problema con Cataluña. Una declaración de intenciones en medio de las conversaciones con el Gobierno para convocar la mesa de negociación del referéndum.

El presidente de la Generalitat, con una advertencia también al Parlament sobre no acatar el calendario judicial que impondrá el Supremo tras su inhabilitación, dice que «no seré nunca un obstáculo y aún menos una condición para nada». Torra recuerda que «o tengo ninguna ambición personal que pase por delante del objetivo de la independencia». Una apelación a los partidos separatistas para que defiendan la autonomía de la cámara catalana.