Bildu y ERC cierran filas: no cambiarán el pacto de Otegi con Sánchez para derogar totalmente la reforma laboral
Sólo tres horas después de anunciarse el acuerdo con los proetarras, el Partido Socialista matizaba que la supresión de la ley no será íntegra
Ni Bildu ni ERC aceptan la matización realizada por el Gobierno al anuncio del pacto entre Sánchez y los proetarras para derogar por completo la reforma laboral. El líder de EH Bildu, Arnaldo Otegi, ya ha trasladado al Gobierno su mensaje de que el acuerdo es el anunciado y no piensa dar marcha atrás. Y su socio estrella, ERC, mantiene exactamente la misma postura.
De este modo, el Gobierno deberá acabar por completo con la reforma laboral que ha permitido crear tres millones de puestos de trabajo si no quiere tener un fuerte desencuentro con dos de sus socios necesarios para mantenerse en el poder.
El coordinador general de EH Bildu, Arnaldo Otegi, no acepta las «notas aclaratorias» sobre el pacto que su formación cerró y anunció con el PSOE y Podemos para derogar «íntegramente» la reforma laboral.
Para Bildu, la derogación firmada el pasado miércoles es un gran acuerdo que debe ser desarrollado, pero nunca diezmado ni minimizado, tal y como han filtrado ya al Ejecutivo.
Socios estratégicos
ERC es el socio estratégico de Bildu. Y ya ha dejado claro que lo es a todos los efectos. Por ello, ha remitido el mismo mensaje al Gobierno de Pedro Sánchez: el de que, si no quiere tener un problema de sostenibilidad en el poder, es mejor que cumpla con el pacto de eliminación total de la reforma laboral.
Hay que recordar que el Partido Socialista corrigió el acuerdo suscrito con EH-Bildu el pasado miércoles por el que la formación proetarra se comprometía a apoyar la prórroga del estado de alarma, a cambio de derogar de «manera íntegra» la reforma laboral.
El pacto se anunció de forma casi instantánea a que el Congreso aprobara, in extremis, la última ampliación del estado de alarma. De hecho, fue el propio presidente del Gobierno quien se encargó de confirmarlo desde la tribuna de oradores del Congreso.
Pero también es verdad que, sólo tres horas después, el PSOE matizaba que la derogación no será total.
Desde el PSOE se aseguró en ese instante que «se anula» el primer punto de dicho acuerdo, que comprometía al Gobierno a la derogación total de la reforma laboral aprobada por el Partido Popular en 2012. Un compromiso que, sin embargo, sí se haría efectivo «antes de la finalización de las medidas extraordinarias adoptadas por el Gobierno en materia económica y laboral derivadas de la crisis originada por el Covid-19».
Así, la matización contemplaba la derogación de dicha reforma, pero limitándola, con carácter urgente, a tres puntos: la eliminación de la posibilidad de despido por absentismo causado por bajas por enfermedad, la derogación de las limitaciones al ámbito temporal del convenio colectivo, «haciéndolo llegar más allá de las previsiones contenidas en el mismo, tras la finalización de su vigencia y hasta la negociación de uno nuevo», y la derogación de la prioridad aplicativa de los convenios de empresa sobre los convenios sectoriales.
Interlocutor
El pacto que llevó a la abstención de Bildu en la votación de la quinta prórroga del estado de alarma, recogía, además, la flexibilización de la regla de gasto para entidades locales, forales y autonómicas. Y ese punto sí se ha mantenido sin discusión.
El acuerdo incial -del que no se apean ni Bildu ni ERC-, fue sellado con la firma de los portavoces parlamentarios de las tres formaciones -Adriana Lastra (PSOE), Pablo Echenique (Podemos) y Mertxe Aizpurua (EH Bildu)- y se trata del primer pacto explícito entre el Gobierno y el partido de Arnaldo Otegi.
El PSOE, eso sí, ya legitimó a Bildu como interlocutor al incorporarlo a la ronda de negociaciones para la investidura de Pedro Sánchez y, más tarde, de los Presupuestos Generales.
Desde el PSOE, pese a todo, no se ha defendido la derogación total de la reforma laboral, que genera discrepancias con los socios de Podemos. No obstante, en el acuerdo con Pablo Iglesias tampoco se recogía esa medida. Los partidos del Gobierno sí se comprometían a una derogación parcial para recuperar «derechos laborales».