Artur Mas se ha ofrecido a Ferraz y Moncloa buscando respaldo para volver a la primera línea política catalana
El ex presidente de la Generalitat, inhabilitado hasta finales de febrero del año que viene, tiene intención de volver a un cargo de alto nivel.
El ex presidente de la Generalitat, Artur Mas, quiere volver a la política. Pese a haber dicho que se retiraba de la primera línea, llegando a abandonar la presidencia del PDeCAT días antes de que se hiciese pública la sentencia condenatoria a Convergència por financiación irregular, Mas y su entorno están trabajando su retorno una vez finalice el plazo de inhabilitación por la organización de la consulta del 9 de noviembre, que expira a finales de febrero del año 2020. Tantas son sus ganas de volver a la primera línea política, que incluso se ha ofrecido a Ferraz y la Moncloa a cambio de buscar ayuda para facilitar su vuelta.
Los movimientos de Mas no son cosa de un día, ya que vienen de mucho más atrás. Cuando Puigdemont empezó a montar La Crida, él y su núcleo de colaboradores más cercanos, entre los cuales David Madí, intercedieron para colocar a un hombre de su confianza, Jordi Sánchez, en la presidencia de este nuevo movimiento político. De esta forma, Mas se quería asegurar también el mismo poder dentro de La Crida, que ya tiene en el PDeCAT tanto por los que forman parte de su dirección como por las bases. Además, a todo ello, cabe sumar que la marca Convergència Democràtica de Catalunya aún está vigente en el registro de partidos.
Y es que pese a que él se fue retirando de la primera línea política, su equipo más cercano nunca abandonó el poder real. Algunos de sus más estrechos colaboradores, como Joan María Piqué, Jordi Cuminal o Francesc Homs siguen vinculados bien con el Govern o con el PDeCAT. Piqué continua cobrando sueldo público de la Generalitat mientras que Cuminal colabora con la Asociación Catalana de Municipios y dirige la estrategia mediática de los presos de JXCat y Homs la estrategia de defensa.
Según fuentes conocedoras de los movimientos de Mas con Ferraz y La Moncloa, el ex presidente de la Generalitat ha mandado varios mensajes asegurando que su retorno a la primera línea política ayudaría al desbloqueo de la situación en Cataluña. Cabe recordar que como líder de la oposición, y pese a que el PSC estaba en el Govern, Mas pactó con José Luís Rodríguez Zapatero el texto de l’Estatut. Con Mariano Rajoy en la Moncloa, por eso, la relación nunca fue buena e incluso llegó a rechazar un acuerdo con el presidente español que pasaba por las urnas, si CiU defendía a su ejecutivo.
Durante el octubre del 2016, durante las horas en qué Carles Puigdemont estuvo dudando entre convocar elecciones o declarar la DUI en el Parlament, mientras intentaba convencer al presidente catalán para poner fecha de elecciones, Mas hablaba con altos cargos del gobierno central, junto a Francesc Homs, poniendo en valor sus intentos para frenar la DUI a cambio de una modificación en la petición de condena del Tribunal de Cuentas contra su patrimonio, que hace que tenga su vivienda embargada.
Mas, que abandonó la presidencia en enero del 2016 tras el rechazo de la CUP a investirlo de nuevo jefe del ejecutivo catalán, ha sido el principal impulsor del independentismo en Cataluña, tras abrazar el separatismo convocando elecciones anticipadas en 2012 pensando que le podía beneficiar electoralmente. Ahora, su retorno, vendría de la mano de la moderación que le permitió resistir en política durante toda su carrera profesional.