Abascal: «¡Qué cara de vicepresidente se le está poniendo a Juan García-Gallardo!»
Las elecciones en Castilla y León dejan un triunfo incuestionable para Vox. El partido de Santiago Abascal logra 13 escaños en los comicios celebrados este domingo, 12 más que en 2019. Un dato que coloca a la formación en una posición de fuerza de cara a la negociación con el Partido Popular para facilitar la gobernabilidad. «¡Qué cara de vicepresidente se le está poniendo a Juan García-Gallardo!», ha exclamado Abascal en su intervención para valorar los resultados. Una afirmación que despeja el punto de partida que marcará Vox en sus conversaciones.
En estos días se había especulado con la posibilidad de que el partido se limitase a pedir un acuerdo programático para hacer presidente a Alfonso Fernández Mañueco. Pero los resultados, que superan incluso las previsiones de los sondeos, han insuflado una euforia incluso inesperada. La investidura del candidato del PP depende, inevitablemente, del voto de los de Abascal. Y Vox está dispuesto a pedir cargos en la Junta. Entre ellos, el de vicepresidente para su candidato.
«Vox tiene el derecho y el deber de formar gobierno en Castilla y León», ha comprometido el líder de Vox ante una militancia entregada. «Vamos a hacerlo como lo hemos hecho siempre, con responsabilidad, en función de la fuerza que los castellanos y leoneses nos han dado», ha asegurado Abascal.
Vox ha logrado representación en ocho de las nueve provincias. Un resultado que consolida la tendencia ascendente del partido. Ni siquiera la falta de experiencia política de su candidato, o que no pudiese intervenir en los debates electorales, le ha influido lo más mínimo. El partido arrancó la campaña con buenas sensaciones y el avance de los días fue confirmando sus aspiraciones.
«Muy pronto Vox demostrará que es la gran alternativa política y la de mayor utilidad para expulsar a Pedro Sánchez del poder», ha proclamado Abascal, levantando a los suyos a gritos de «¡presidente, presidente!». El líder de Vox ha ironizado con las encuestas que otorgaban un resultado incluso mediocre al partido, a las que se ha referido como «los Tezanos de izquierdas» y «los Tezanos de derechas».
De hecho, el presidente de Vox ha admitido que los resultados obtenidos este domingo han superado sus expectativas, por lo que ha agradecido a sus votantes y seguidores ya que «por encima de las encuestas y predicciones» acuden a las urnas y, ha apostillado, dan «una lección a los corruptos y tramposos», como se ha referido a las empresas encuestadoras, al CIS y a los «medios de comunicación cómplices».
Abascal no ha concretado los términos de la negociación con el PP, pero sí ha avanzado que pondrán «encima de la mesa» su programa para que la «reindustrialización» de la región sea un eje del futuro Gobierno, que el campo, la agricultura y la ganadería, puedan «recuperar el futuro que se les ha arrebatado» y para que los jóvenes puedan «prosperar en esta tierra que les vio nacer, de la que se sienten orgullosos y en la que querrían seguir para acompañar a sus padres y abuelos».
Por otro lado, ha reiterado la voluntad de su formación de llevar «a la mesa de negociación» las «demandas legítimas» de las formaciones de «la España olvidada» y así se ha referido a los partidos locales de «León, Soria y Ávila», que según su opinión «quizá no sean decisivos en la formación de un gobierno». Pero no sólo de ellos, sino también de plataformas de provincias como Salamanca, Segovia, Burgos, Palencia o El Bierzo.
«Un Gobierno del PP»
Desde Génova aguardan con cautela las conversaciones con Vox. El primer mensaje, tras conocer las demandas de Abascal, es que el futuro Gobierno de Castilla y León «será del PP, con un programa del PP».
En esos términos se ha pronunciado el secretario general, Teodoro García Egea, que ha manifestado que en esta comunidad autónoma «debe» gobernar su partido.
García Egea ha asegurado que estas elecciones son las de «la misión cumplida» porque el PP pasa a ser la fuerza más votada en Castilla y León, «suma más votos que el PSOE y Podemos juntos» y «triplica a Vox». «El PP gana y el PSOE pierde. Lo contrario que hace tres años», ha enfatizado.
Además, ha recalcado que el resultado de estos comicios confirma que «el cambio de ciclo es imparable». «Castilla y León ha dicho ‘no’ a Pedro Sanchez y a sus socios y compañeros de viaje», ha enfatizado.
El número dos del PP ha afirmado que Mañueco «tiene la legitimidad de darle a los castellano y leoneses un Gobierno que pueda sin ataduras» llevar adelante las ideas y propuestas de la formación.
En su opinión, a Sánchez «le va a interesar» hablar de ese posible pacto de PP y Vox pero su formación va a hablar de las cuestiones que «interesan a los españoles». Como Mañueco, ha señalado que el PP hablará con todos los partidos con representación en las Cortes de Castilla y León.
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