El socialista Puig ordena suprimir becas para niños con necesidades especiales
El Gobierno valenciano, en manos del socialista Ximo Puig, ha endurecido los criterios para la concesión de las becas a niños con necesidades educativas especiales en el nuevo curso académico.
Según ha podido saber OKDIARIO, varias familias afectadas han denunciado que, a días de que finalice el plazo para solicitar las becas, desde su centro educativo se les ha advertido de la denegación, pese a que en años anteriores sí se les habían concedido.
Se trata, en concreto, de una interpretación más dura de uno de los requisitos, el que exige la certificación de un inspector de la zona sobre la «necesidad de recibir estos tratamientos por la inexistencia o insuficiencia de la atención pedagógica proporcionada por el centro en el que está escolarizado el alumno solicitante, para cuya valoración podrán servir de referencia las horas consignadas en el informe del equipo de orientación» o bien «la inviolabilidad de matriculación del alumno solicitante en un centro que disponga del servicio de reeducación requerido».
De acuerdo al texto de la convocatoria-similar al de años anteriores- el inspector de cada zona debe determinar si las necesidades terapéuticas del alumno están cubiertas con la atención que reciben en el centro, lo que, en la práctica, es altamente subjetivo.
La atención en los centros es «irrisoria»
Hasta el momento, denuncian varias familias, se atendía no obstante a la petición de los padres para que los tratamientos prestados fuera del centro estuviesen cubiertos por estas becas.
Ahora, sin embargo-como consta en las órdenes internas emitidas-si el colegio dispone ya de un servicio de atención a estos alumnos, no tendrán derecho a recibirla.
Las becas, firmadas por la secretaría de Estado de Educación, benefician a alumnos con discapacidades o trastornos grave de conducta que requieran de una «necesidad específica de apoyo educativo», con un determinado nivel de ingresos familiares, y están destinadas a cubrir gastos derivados de reeducación pedagógica, transporte, comedor y libros o material didáctico.
«Se justifican diciendo que nuestros hijos ya están atendidos en el colegio, que sus necesidades están cubiertas y que no necesitan otras terapias. Y esto lo deciden un mes después de haber salido la convocatoria de las becas y con un gran secretismo. No lo entiendo», ha denunciado una de las afectadas, madre de dos niños con necesidades especiales.
«La orientadora nos muestra una hoja con el membrete de la Generalitat Valenciana en donde se les dice cómo actuar. Una hoja que no nos facilitan y que sólo nos permiten leer, ¿De qué tienen miedo?. Sí se especifican, según su criterio, las horas de PT (pedagogía terapéutica) y AL (apoyo del lenguaje) que necesita cada niño y argumentan que dado que esos apoyos están en el colegio no es necesaria ninguna beca, según ellos con los apoyos mínimos del cole estos niños tienen bastante», añade.
Los padres lamentan que, en la mayoría de los casos, la ayuda en los centros es «irrisoria» y absolutamente insuficiente, sobre todo, porque los niños no reciben una atención individualizada, como se requiere en estos casos.
«La mayoría de estos nenes acuden a terapia entre 4 y 8 sesiones semanales. En mi caso me cubre menos de la mitad de las terapias que necesitan mis hijos, pero es impensable que mis hijos puedan seguir llevando todas las terapias sin esa beca, los que me conocéis sabéis que tengo dos. Pero hay familias que desgraciadamente no tienen trabajo y que esa beca era la única forma de darle a sus hijos esas terapias que harán que sus hijos sean lo más independientes posible en el futuro», cuenta esta afectada, que se queja de que dirigentes como Puig y Mónica Oltra, vicepresidenta de la Generalitat, se «llenen la boca» hablando de ayudas sociales y, sin embargo, deniegue prestaciones «primordiales» para que los pequeños «avancen».