Vodafone no sabe qué hará con Ono: los clientes desconocen quién les dará el servicio

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El presidente y consejero delegado de Vodafone España, Antonio Coimbra (Foto: EFE).

Vodafone no ha tomado aún ninguna decisión sobre el futuro de su fusión societaria con ONO. Después de paralizar el pasado verano la operación por el impacto fiscal que supondría la operación, el problema es que los más de 4,5 millones de clientes que en la actualidad tienen contratos con ambas firmas desconocen qué compañía les dará los servicios en el futuro.

Ahora mismo, la fusión societaria se encuentra paralizada temporalmente y desde la Vodafone aún no tienen planeado tomar ninguna decisión. Es decir, ni la fusión sigue adelante ni está anulada, sino que se encuentra en un impasse.

Además, los clientes permanecen a la espera de noticias por parte de la compañía, pues tan sólo han recibido una carta informando de la fusión, pero no han recibido ningún tipo de comunicación adicional, ni siquiera informando de la paralización de la operación con ONO.

Después de que Vodafone consiguiera todos los permisos y autorizaciones necesarios, incluido el visto bueno de la Comisión Europea, y después de poner encima de la mesa 7.200 millones de euros por ONO, una tasa municipal del Ayuntamiento de Madrid está frenando la operación.

Desde la compañía aseguran que el frenazo en la operación no les ha supuesto ningún perjuicio económico, sino que precisamente han paralizado la fusión para evitar que desde el Consistorio madrileño se les aplique unas tasas (de unos 40 millones de euros) que consideran «desproporcionadas».

Vodafone España anunció este mes de septiembre que recurrirá, tanto en España como en instancias europeas, el fallo del Tribunal Supremo que avala el cobro de dicha tasa a las operadores por las infraestructuras fijas que se tienden en el suelo público para prestar el servicio de móvil.

El culebrón que está siendo la operación incluso ha desembocado en que la operadora británica utilice una agresiva política comercial para robarle clientes a su propia filial. El departamento comercial de Vodafone está recomendando a los antiguos clientes de ONO que finalicen sus contratos y que los renueven directamente con la nueva matriz, lo que supone desmantelar la filial en proceso de integración.

La estrategia de Vodafone es aprovechar los traslados de domicilio de los usuarios. Cuando el cliente de ONO se pone en contacto con la operadora matriz el departamento de atención al cliente le recomienda que se dé de baja en ONO, pagando la penalización correspondiente, y que contrate los servicios de Vodafone que, en realidad, son los mismos y se ofrecen con la misma infraestructura.

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