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Los productos que no debes comprar en Lidl

Lidl es uno de los supermercados de mejor calidad precio que existe, pero aún así, aunque fueran regalados, estos productos no debes ponerlos en el carro

Los productos que no debes comprar en Lidl
Los productos que no debes comprar en Lidl
Gemma Meca
  • Gemma Meca
  • Licenciada en Historia, máster en Periodismo y Comunicación Digital. Redactora en Ok Diario. Cuento historias, soy amante de los astros, sigo a la luna, los TT de Twitter y las tendencias en moda. Experta en noticias de consumo, lifestyle, recetas y Lotería de Navidad.

Lidl es uno de los supermercados de mejor calidad precio que existe, pero aún así, aunque fueran regalados, estos productos no debes ponerlos en el carro de la compra. Hay algunos alimentos de nuestra lista de la compra que se caerán de inmediato cuando descubramos qué es mejor no comprar en Lidl. No todo lo caro es bueno, ni tampoco la barato, si leemos un poco las etiquetas o empezamos a hacer cuentas con las calorías, llegaremos a la conclusión que, aunque cueste céntimos, mejor dejarlo en la estantería por nuestro propio bien. Toma nota de esta lista de productos que no debes comprar en Lidl nunca.

Nunca compres estos productos de Lidl

Las pizzas congeladas de Lidl no están a la altura del resto de sus productos. El precio de las pizzas congeladas puede ser muy barato, pero no nos darán esa alegría esperada de comer pizza en casa. Su masa no tiene la consistencia esperada y le falta un punto de sabor que no sabemos identificar. No es una buena elección si queremos comer pizza.

El tomate frito de Lidl acumula muy malas críticas. Este tomate es muy barato, pero también tiene una larga lista de comentarios desafortunados. Podemos usarlo en caso de emergencia para un arroz a la cubana, pero jamás conseguirá el acabado de otras salsas de tomates que ya vienen hechas, es mejor invertir unos céntimos más para un básico de la cocina como este.

El gel del Lidl no cumple con las expectativas. Salir limpio de casa nos cuesta céntimos, los geles Cien de Lidl no llegan a un euro, aunque la calidad es especialmente mala. Inicialmente percibimos el olor, pero desaparece casi de inmediato. La piel hidratada y cuidada que buscamos acaba siendo un espejismo, es mejor invertir un poco más en geles de calidad.

El sushi y las ensaladas precocinadas de Lidl podrían mejorarse. Este tipo de platos precocinados que escogemos los días que tenemos prisa deben estar buenos. Son la última esperanza para darse un capricho que se esfuma cuando sacamos el producto. El sushi tiene una apariencia muy artificial y las ensaladas no son todo lo frescas que esperaríamos. Aunque un poco de mayonesa o salsa de soja puede hacer milagros, no merece la pena comprar estos productos en Lidl.

Las legumbres bio en conserva no es tan natural como debería. En esencia un producto bio no puede estar sometido a un tratamiento de conserva agresivo. Lo mejor es optar por legumbres ecológicas secas, pero no invertir dinero en las conservas de Lidl, aunque sea bio. Se agradece el esfuerzo que realiza la cadena de supermercados en hacer su gama bio, pero las legumbres podrían estar mejor envasadas.

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