La OCU filtra información privilegiada: estos son los supermercados mas baratos en realidad

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha dado a conocer nueva información sobre los precios de los supermercados en España y de qué modo estos han evolucionado durante este año, revelando datos que podrían cambiar la forma en que los consumidores eligen dónde hacer sus compras diarias. A través de su  minucioso análisis, la OCU ha examinado los precios de 238 productos de alimentación y droguería en más de 1.000 tiendas distribuidas en 65 ciudades del país. Este estudio abarca una amplia gama de productos, desde frescos y envasados hasta los más económicos, permitiendo a la organización identificar tendencias en el sector de la distribución alimentaria que pueden preocupar a los consumidores. Según los resultados, a pesar de una ligera moderación en el aumento de precios, las cadenas de supermercados siguen mostrando una tendencia al alza, algo que nos afecta directamente.

En concreto, durante este año 2024, el aumento medio de los precios en los supermercados ha sido del 2,9%, un dato inferior en comparación con los años anteriores, donde las subidas alcanzaron picos del 12,1% en 2023 y del 12,7% en 2022 pero que no significa que el aumento siga siendo significativo con productos que han incrementado sus precios de forma desorbitada. Según revela la OCU, los productos que más han sufrido aumentos por encima del Índice de Precios al Consumo (IPC) incluyen el aceite de oliva, que se ha encarecido un 76%, seguido por el zumo de naranja con un 40% y el plátano de Canarias que supera el 30% de incremento. ¿Y dónde es más barato hacer la compra? Te lo desvelamos a continuación ya que la OCU explica qué supermercados se han encarecido más y cuáles tienen los precios más bajos.

Los supermercados más baratos según la OCU

El estudio de la OCU revela que al respecto de los supermercados, la mayoría ha ajustado sus precios en línea con el IPC del 3,4%. Algunas cadenas han destacado por subir los precios considerablemente por encima de este promedio. Varios supermercados han logrado reducir sus precios por debajo del 1%, lo que representa una gran oportunidad de ahorro para los consumidores. Lidl, por ejemplo, ha bajado sus precios en un 0,6% y Aldi los ha reducido en un 0,7%. Este comportamiento de precios crea un paisaje de compras donde elegir el supermercado adecuado puede marcar una gran diferencia económica a lo largo del año.

Los productos que más bajan de precio

La tendencia al alza de los precios en los supermercados refleja no sólo las dinámicas internas de cada cadena, sino también el impacto de factores externos como la inflación y la crisis de suministros que se han experimentado en los últimos años. Aunque el aumento del 2,9% en 2024 es menor comparado con los incrementos de los años anteriores, sigue siendo un reto para los consumidores, especialmente cuando se analizan los productos básicos. El aceite de oliva, por ejemplo, ha sufrido un aumento abismal, reflejando no sólo la subida del coste de la materia prima sino también problemas relacionados con la producción y la exportación. Este tipo de incrementos repercuten directamente en la cesta de la compra diaria, obligando a los consumidores a buscar alternativas más económicas o a reducir su consumo.

Por otro lado, la bajada de precios de ciertos productos como limones que han bajado un 15%, los tomates de ensalada con una caída del 21% y el aceite de girasol, que ha registrado una disminución del 23% representa una luz de esperanza para los compradores. Estos descensos, aunque positivos, no compensan totalmente los aumentos en otros productos esenciales, pero demuestran que todavía hay oportunidades para encontrar ofertas y ajustar el presupuesto familiar. La clave está en la información y en saber dónde hacer la compra para maximizar el ahorro.

La batalla entre supermercados: quién sube y quién baja precios

El análisis de la OCU también muestra un panorama diverso en cuanto a la política de precios de los supermercados. Mientras que la mayoría de las cadenas siguen la tendencia de subir los precios acorde al IPC, algunas destacan por hacerlo de manera más pronunciada. Estas variaciones hacen que la elección del supermercado sea una decisión crítica para los consumidores, que pueden llegar a gastar mucho más de lo necesario simplemente por no comparar precios.

En contraste, supermercados como Lidl y Aldi están apostando por estrategias de reducción de precios, lo cual no solo mejora su competitividad en el mercado, sino que también se traduce en un considerable ahorro para los clientes. La OCU estima que el ahorro anual puede llegar a los 1.272 euros al optar por hacer la compra en un supermercado más económico en lugar de uno con precios más elevados. Este dato no solo refleja la importancia de elegir bien, sino también la capacidad de estos supermercados para ajustar sus precios de manera eficiente sin comprometer la calidad de sus productos.