Moody’s alerta: la desaceleración de la economía española frenará los ingresos de las autonomías
El endeudamiento de las regiones de España analizadas por la agencia Moody’s alcanzará en 2020 los 271.000 millones de euros, frente a los 267.000 millones de 2018, según la calificadora de riesgos, que advierte de que la desaceleración del crecimiento de la economía española frenará los ingresos de las comunidades autónomas, lo que reducirá el ritmo de consolidación fiscal a nivel regional.
Los últimos pronósticos de Moody’s anticipan una desaceleración del crecimiento de la economía española al 1,8% desde el 2% en 2019 como consecuencia del debilitamiento del comercio y el crecimiento de la actividad a nivel global.
«Los gobiernos autonómicos de España continuarán beneficiándose del crecimiento de los ingresos operativos, aunque se ralentizarán al 2% en 2020 desde el 3,2% en 2019 debido al desempeño económico más débil a nivel nacional», ha señalado Marisol Blázquez, analista de Moody’s.
En su informe, la calificadora de riesgos calcula que la deuda neta directa e indirecta de las regiones evaluadas por Moody’s seguirá su trayectoria al alza y alcanzará los 271.000 millones de euros en 2020, frente a los 267.000 de 2018. La ratio de deuda respecto de los ingresos operativos bajará al 186% a finales del próximo año, cuando en 2018 era del 194%.
No obstante, Moody’s considera que solo algunas regiones españolas lograrán el equilibrio fiscal en 2020, mientras que otras registrarán déficits récord, aunque en su conjunto no cumplirán la meta de déficit cero fijada por el Gobierno central.
En este sentido, Moody’s señala que las necesidades de financiación de las regiones seguirán siendo elevadas y alcanzarán los 33.000 millones de euros en 2020 como consecuencia de los significativos vencimientos previstos para el próximo año, la mayoría de los cuales están relacionados con los mecanismos de liquidez puestos en marcha por el Gobierno de España.
Por otro lado, Moody’s espera que los gobiernos regionales incrementarán su recurso a la financiación exterior a través de emisiones de bonos a medida que retornen gradualmente a los mercados de capitales, beneficiándose del entorno de bajos tipos de interés.
A este respecto, Moody’s apunta que Madrid seguirá apoyando con liquidez a bajo coste a aquellas regiones que no pueden acceder a los mercados de capitales o para aquellas que combinen ambas opciones.
De este modo, la agencia calcula que los costes por intereses soportados por las regiones descenderán a unos 3.400 millones de euros en 2020, frente a los 3.600 millones en 2018.
Asimismo, Moody’s considera «improbable» la aprobación por un Gobierno en minoría de una reforma del sistema de financiación autonómico que incrementase los ingresos de las regiones.
«Esperamos que una futura reforma otorgue mayor autonomía fiscal a las regiones españolas, permitiéndoles modificar las tasas impositivas y/o ajustar la parte de los ingresos tributarios compartidos con el Gobierno central», añade la calificadora de riesgos.