El Ibex ata en corto a sus consejeros y eleva la imposición de cláusulas ‘malus’ sobre los salarios
El Ibex 35, las mayores compañías cotizadas españolas, ata en corto a sus consejeros, y cada vez un mayor número de ellas incluyen en los contratos cláusulas que permiten suprimir o reducir los componentes variables entregados en las retribuciones en función de determinados factores.
La Comisión Nacional del Mercado de Valores indica en los informes sobre retribuciones y gobierno corporativo de las cotizadas españolas correspondientes a 2021, publicados ayer lunes, que las sociedades del Ibex 35 «han aumentado el número de planes a corto plazo que incluyen cláusulas malus».
Las cláusulas malus son aquellas que permiten eliminar o reducir la parte pendiente de abonar de la retribución variable entregada en ejercicios anteriores si, durante el periodo determinado de diferimiento, se hubieran producido hechos perjudiciales para la situación financiera de la compañía, o si se comprobara que, en el cálculo del importe de la remuneración variable, se hubieran empleado datos inexactos.
El organismo presidido por Rodrigo Buenaventura indica que 26 de las compañías analizadas del Ibex 35 especifican en sus informes la existencia de «algún tipo de cláusula especial que regula el funcionamiento de estos planes a corto plazo».
En el resto de compañías cotizadas españolas, sin embargo, indica la CNMV en sus informes, «predomina» la inclusión de otro tipo de cláusula, las clawback, que permiten a las empresas reclamar el reembolso de variables por mala praxis.
Las grandes cotizadas españolas han actualizado en los últimos tiempos sus políticas retributivas y en particular lo referido a las cláusulas malus, habiéndose producido en los juzgados algunos casos relevantes de activación de dicha cláusula.
Santander ha acudido a los Juzgados para activar la cláusula malus y reclamar buena parte de las cantidades entregadas por Banco Popular como retribución variable a su expresidente, Ángel Ron, y a su exconsejero delegado, Francisco Gómez, que percibieron millones de euros en concepto de prejubilación antes de la disolución de la entidad, en junio de 2017.
La multinacional tecnológica y de defensa Indra analiza en estos momentos la aplicación de la cláusula malus para tratar de reducir la indemnización percibida por su exconsejera delegada, Cristina Ruiz, cercana a los dos millones de euros, como ha publicado este diario.
Telefónica acordó el pasado año homogeneizar las cláusulas malus y clawback «para su aplicación sobre cualquier elemento de retribución variable». La compañía presidida por José María Álvarez-Pallete aprobó en la Junta de Accionistas de 2021 incluir dichas cláusulas en su Plan de Incentivos a Largo Plazo 2021-2026.
BBVA comunicó en febrero de 2021 una nueva política de retribuciones con «cambios» en la cláusula malus y clawback de la retribución variable anual de los consejeros ejecutivos.
El banco presidido por Carlos Torres explicó que esos cambios pretendían «reflejar un nuevo supuesto para la aplicación de los mecanismos de reducción y recuperación de la retribución variable en caso de daño reputacional relevante al banco». La entidad previsiblemente podría activar esas cláusulas en el caso de que su expresidente Francisco González, o algunos de sus exconsejeros, fueran condenados por el caso Villarejo.
La inmobiliaria Merlin, que a finales del pasado año vivió un encontronazo entre su primer accionista, Santander, y su consejero delegado, Ismael Muñoz, aprobó en Junta de Accionistas, el pasado mes de mayo, cambios en la política retributiva. La Socimi presidida por Javier García-Carranza acordó vincular un elevado porcentaje de la retribución a los resultados incorporando también cláusulas malus y clawback.
En su informe, la CNMV señala que un «número importante» de cotizadas, incluyen medidas de gobernanza como la potestad del consejo de modular o anula la retribución variable. Pero añade que, en algunos casos, «no siempre las sociedades incluyen cláusulas malus o clawback en los contratos de los consejeros ejecutivos, para los componentes variables, como sería deseable».