Iberia plantea gestionar Air Europa a cambio de una comisión sin poner un euro para su rescate
Iberia está tensando la cuerda al máximo en sus negociaciones con el Gobierno sobre Air Europa. Sabedora de su posición de fuerza, la filial IAG ha planteado una operación en la que se haría cargo de la gestión de la aerolínea de la familia Hidalgo de forma separada a cambio de una comisión para garantizarse unos ingresos recurrentes, según fuentes conocedoras de la situación. Asimismo, descarta una fusión como se había planteado inicialmente y sólo está dispuesta a tomar una participación minoritaria de forma que no tenga que poner dinero y que no consolide en su balance.
Para esta propuesta, la aerolínea que preside Javier Sánchez-Prieto cuenta con la fortaleza de que la alternativa para la SEPI sería tener que quedarse ella sola con Air Europa y gestionarla, algo que tendría unos costes insoportables para el Estado. Y también tiene a su favor que el Gobierno no quiere dejar caer a la aerolínea todavía propiedad de Globalia bajo ninguna circunstancia, como adelantó OKDIARIO.
No obstante, las fuentes consultadas explican que la sociedad estatal pretende rebajar este planteamiento para hacerlo más aceptable, ya que Iberia establecería una tarifa que dejaría a Air Europa sin posibilidad de obtener beneficios e imposibilitaría que el Estado recupere los 475 millones del rescate de la compañía (y los que puede tener que inyectar adicionalmente).
Una posibilidad es que Iberia perciba un canon que simplemente cubra los gastos operativos que le suponga operar Air Europa y, a partir de ahí, que tenga derecho a percibir los primeros beneficios que se obtengan (si se obtienen) hasta un límite. A partir de ese tope, sería la SEPI la que se apuntaría las ganancias. Una fórmula conocida como waterfall que se puede ejecutar mediante diferentes clases de acciones (A y B), unas para Iberia y otras para la SEPI.
Iberia no está dispuesta a pagar por un porcentaje
En todo caso, lo que queda descartado es una fusión de las dos aerolíneas como se planteó inicialmente en 2019 y a la que ambas renunciaron en diciembre como adelantó en exclusiva OKDIARIO. A lo único a lo que está dispuesta la aerolínea que preside Javier Sánchez-Prieto es a tomar un porcentaje minoritario (que algunos medios cifran en el 40%), ya que no quiere bajo ningún concepto consolidar en su balance la deuda de Air Europa.
Además, las fuentes explican que Iberia tampoco acepta poner dinero para hacerse con ese porcentaje del capital, con el argumento de que Air Europa tiene fondos propios negativos. Si hace falta inyectar más capital, debería ponerlo el Estado.
Algo que otras fuentes consideran imprescindible, ya la compañía todavía de Globalia necesita nueva liquidez para aguantar la crisis derivada de la pandemia y para hacer frente a sus compromisos de pago, empezando por los cerca de 150 millones que debe por el alquiler de los aviones (que serán embargados si la empresa no abona ese dinero), como informó este periódico. Y eso que los bancos acreedores han aceptado que Air Europa se quede en caja los 75 millones de la indemnización pagada por Iberia por romper la fusión en vez de utilizarlos para amortizar deuda.
Una mera conversión en capital de la deuda en manos de la SEPI no proporcionaría esa liquidez. Por tanto, todo apunta a que necesitará una nueva inyección de fondos del Estado, lo cual incrementaría el riesgo para los contribuyentes y podría dar pie a demandas ante los tribunales o las autoridades de competencia. Una situación endiablada que debe resolverse antes de la fecha límite del 31 de enero.