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Grifols cae más de un 12% en bolsa tras la rebaja de Moody’s y las advertencias de Fitch

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La sede de Grifols en Barcelona.

Los problemas de Grifols no cesan y sus acciones se desploman en bolsa más de un 12% al cierre de la sesión bursátil, después de que este miércoles se conociera, con el mercado ya cerrado, que la agencia de calificación crediticia Moody’s había rebajado el ‘rating’ de la firma catalana a ‘B3’ desde ‘B2’.

Moody’s explicó que esta rebaja se debe a los niveles de apalancamiento de la compañía -incluso a pesar de la reducción de deuda esperada por su reciente venta de activos-  y su modelo de gobernanza, poniendo así fin a la revisión iniciada el pasado 5 de marzo por la menor generación de caja y el retraso en la publicación de sus cuentas auditadas. Así, la compañía catalana de hemoderivados caía un 12,21% al cierre de la jornada, hasta intercambiar sus acciones a 7,97 euros.

Con el resultado de este jueves, la compañía acumula una depreciación bursátil en lo que va de año del 48%, en tanto que la capitalización se ha situado en los 4.685 millones de euros, lejos de los casi 10.000 millones con los que despidió 2023.

La agencia ha alegado que las consideraciones en torno a la gobernanza han sido también un factor clave en la rebaja: «En particular, la limitada previsión del desempeño financiero, la gestión de riesgos de la compañía, un historial de desempeño deficiente, una estructura organizativa compleja y opaca en la que mediaron transacciones con partes relacionadas -en referencia a la relación de Grifols con Scranton, Haema y BPC-, así como la rotación de la gerencia», han añadido.

Aunque «reconocemos que Grifols ha realizado algunos cambios positivos en su gobierno, incluida la reciente separación de la dirección de los accionistas y el nombramiento de un nuevo consejero delegado»; en este momento «existe un historial limitado de operaciones de la empresa después de estos cambios», han subrayado.

Respecto al ‘rating’ de Grifols, Fitch Ratings ha revisado la perspectiva de la calificación crediticia a largo plazo de la firma catalana, de negativa a estable, y lo ha confirmado en ‘B+’, mientras que Moody’s lo rebajó ayer a ‘B3’ desde ‘B2’.

De su lado, la agencia ha reconocido a su vez los pasos dados por la compañía catalana de hemoderivados para abordar los vencimientos de sus bonos con vencimiento en el primer semestre de 2025 y mejorar su posición de liquidez. En ese sentido, ha citado que recaudó 1.300 millones de euros en pagarés senior garantizados de colocación privada y utilizó los ingresos para reembolsar sus 1.000 millones de euros en pagarés senior no garantizados con vencimiento en mayo de 2025.

Asimismo, ha señalado que Grifols cerró la venta de una participación del 20% en Shanghai RAAS (SRAAS) y «esperamos que utilice los ingresos relacionados (1.600 millones de euros) para reducir su deuda senior garantizada». Pese a todo, Moody’s ha concluido que la liquidez de Grifols es frágil, si bien es adecuada para los próximos doce meses; más allá de eso, han observado que el mantenimiento de una liquidez adecuada dependerá de que Grifols regrese a una generación positiva del flujo de caja libre.

Al margen de las advertencias de Moody’s y Fitch, según ha informado El Confidencial, CaixaBank, BBVA y Sabadell han rechazado refinanciar su parte del crédito de 400 millones de euros de deuda con vencimiento inmediato de Scranton Entreprises BV, la sociedad holandesa a través de la cual la familia afianza su control del capital de la multinacional catalana.

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