La gran empresa busca una posición común frente a Sánchez: «Sin seguridad jurídica no habrá inversión»

El mundo de la gran empresa española ha empezado a mantener contactos para tratar de fijar una posición común frente a los constantes ataques del Gobierno de Pedro Sánchez. El mensaje único que pretende lanzar el sector es que «sin seguridad jurídica no habrá inversión» en España, según fuentes al tanto de estos encuentros.

Como es sabido, en las últimasfechas varios empresarios y altos directivos han elevado la voz contra las políticas antiempresa del Ejecutivo, en especial contra la prolongación de los impuestos a la banca y a las energéticas (que además van a subir, como adelantó OKDIARIO). Pero también contra la desigualdad entre españoles y comunidades autónomas que implican algunas de las prebendas concedidas por Sánchez a sus socios a cambio de su investidura.

Las fuentes consultadas explican que, ante esta situación, varias grandes compañías están convencidas de que es necesario fijar una posición única en vez de que cada una haga la guerra por su cuenta. Una posición que deje claro a Pedro Sánchez que todas están dispuestas a frenar sus inversiones en España (y la consiguiente creación de empleo) si no se les garantiza un marco jurídico estable y más favorable a la empresa. Y por eso han iniciado estas conversaciones al máximo nivel entre empresas y entidades financieras para alcanzar un acuerdo.

Brufau, Galán y Roig

El último episodio en este sentido lo protagonizó la semana pasada Antonio Brufau, presidente de Repsol, quien advirtió de que se puede llevar 1.500 millones de inversión a Portugal o Francia si no hay «estabilidad jurídica y fiscal» en España. A finales de octubre, el consejero delegado de la petrolera, Josu Jon Imaz, también señaló que la compañía analizaría las condiciones en España antes de tomar decisiones de inversión, asegurando que buscarían alternativas si esas condiciones no eran lo suficientemente estables y atractivas para garantizar la rentabilidad de los proyectos.

Anteriormente, también había lanzado una advertencia en este mismo sentido Juan Roig, propietario de Mercadona, quien aseguró que, si el clima político que se vive en España se estuviese dando en Portugal, donde la compañía está en claro proceso de expansión, Mercadona «ralentizaría las inversiones».

«Las empresas, los trabajadores necesitamos tranquilidad, si este mismo problema que tenemos en España lo tuviéramos en Portugal, nosotros, que estamos en plena expansión, ralentizaríamos las inversiones. Y eso no puede ser, tenemos que dar tranquilidad al país y tranquilidad a los españoles», según Roig, quien considera necesario un «marco de estabilidad» para todo el país.

Ignacio Sánchez Galán, presidente de Iberdrola y uno de los directivos que ha sido más critico públicamente con las políticas de Sánchez, ha preferido una táctica más sutil: anunciar fuertes inversiones en otros países, como Reino Unido, donde prevé desarrollar proyectos por valor de 8.000 millones.

Anteriormente, varios altos directivos de la banca habían mostrado su rechazo rotundo a la prolongación y elevación del impuesto extraordinario, pero sin llegar a amenazar con la congelación y reducción de inversiones. Entre ellos, se encuentran Dolores Dancausa (Bankinter), Gonzalo Gortázar (CaixaBank) o Héctor Grisi (Santander).