El Gobierno cargará a las eléctricas la compensación a las centrales de gas por topar el precio

El Gobierno no va a compensar a las centrales de ciclo combinado por topar el precio del gas. Finalmente ha decidido que sean el resto de energías generadoras de electricidad las que compensen el dinero que van a perder las gasistas, lo que supone un nuevo golpe para estas compañías. Se une además la modificación en el sistema de cálculo de los llamados beneficios caídos del cielo, que las eléctricas niegan reiteradamente, lo que supondrá también una reducción de los ingresos de las eléctricas.

Aunque el Ministerio de Transición Ecológica que dirige Teresa Ribera aún no ha hecho público el precio al que va a topar el precio del gas, asegura que sigue trabajando con Portugal para finalizar el texto que enviarán a Bruselas para que de el visto bueno «en semanas», sí ha aclarado ya que el dinero que pierdan las gasistas por generar electricidad a un precio inferior al que compran el gas será compensado por el resto de energías que acuden al mercado mayorista, el conocido como pool.

«La compensación será por el resto de energías que acuden al mercado mayorista: la nuclear, las renovables, la hidráulica… De esta forma, aunque estas empresas ganarán menos dinero porque el precio final en el pool será inferior, seguirán siendo rentables porque el precio al que se tope el gas seguirá dándoles importantes beneficios», señalan fuentes del Ministerio de Transición Ecológica.

Por lo tanto, Ribera ha aclarado ya una de las dudas que había sobre sus planes para topar el precio del gas. Habrá compensación a las centrales de gas, pero no se generará déficit de tarifa ni lo pagarán los usuarios, sino las eléctricas que acudan al mercado mayorista a vender su electricidad.

Incógnitas

Quedan pendientes sin embargo otras incógnitas que el Gobierno no ha aclarado. En primer lugar, cómo evitará que los franceses se aprovechen de una luz más barata subvencionada por las eléctricas españolas. «Se está trabajando en un sistema de fijación de precios para la energía que se exporta a Francia», explican fuentes del Ministerio. En Francia tampoco hace gracia que la luz en España sea más barata que en su país.

Y, en segundo lugar, lo más importante, el precio final al que se va a topar el gas. La ministra Ione Belarra, de Podemos, habla de 30 euros por megawatio hora pero el Ministerio sólo asegura que será «el precio más bajo posible». «Hay que analizarlo bien porque tiene que dar el visto bueno Bruselas», señala.

‘Beneficios caídos del cielo’

Además de cargar con la compensación a las gasistas, el Gobierno ha aprobado en el real decreto ampliar los contratos incluidos en los recortes a los llamados beneficios caídos del cielo. El Ejecutivo aprobó en octubre que fueran muy limitados -de hecho es probable que la recaudación de estos primeros meses sea mínima- pero ahora se amplía a la renovación de contratos bilaterales ya existentes y a los nuevos -a un precio máximo de 67 euros por megawatio hora-.