Los funcionarios de Vigilancia Aduanera piden convertirse en un cuerpo autónomo dentro de Hacienda
Un cuerpo de policía aduanera y fiscal
La Asociación Profesional de Investigación Aduanera y Fiscal (IAF) pide convertirse en un cuerpo autónomo dentro de Hacienda al servicio de jueces y fiscales. Su intención es poner negro sobre blanco el trabajo que llevan desempeñando, desde los años 90, cerca de 2.000 hombres y mujeres de vigilancia aduanera. Desde la IAF sostienen que esta independencia les permitiría “ganar fluidez y trabajar más en equipos multidisciplinares”.
Se trata de una propuesta donde los funcionarios de Vigilancia Aduanera operarían con autonomía, como un cuerpo de policía aduanera y fiscal, bajo el paraguas del Ministerio de Hacienda. Fernando Iglesias Pérez, presidente de IAF insiste en que son “los ojos de la Agencia Tributaria en la calle”.
Así ha descrito, el Presidente de IAF, la labor que llevan a cabo durante la jornada sobre “La lucha contra la economía sumergida: La actuación del Servicio de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria”, organizada por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE). Iglesias Pérez ha señalado que este cuerpo trabajaría de forma multidisciplinar, con otros cuerpo especializados no solo en la lucha contra el fraude aduanero, los delitos tributarios y fiscales, narcotráfico, piratería y contrabando al servicio de jueces y fiscales.
Lesmes: «si la policía fiscal está en la retaguardia, hay que ponerla en primera línea y esta es nuestra lucha»
Mientras, el portavoz de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria, Julio Lesmes, ha instado a “poner a la policía fiscal en primera línea”. A su juicio, actualmente se encuentra en la “retaguardia” y esa es su lucha.
Y es que nada menos que el 90% de las actividades de la policía aduanera y fiscal se refiere al delito fiscal, el blanqueo de capitales y el narcotráfico. El 10% restante lo engloban los delitos de contrabandos y fraudes aduaneros tributarios, como el infravalor de mercancías, piratería. Un dato que lleva a Lesmes a “poner el acento en los próximos años” en los delitos de “blanqueo de capitales”.