La España de Sánchez duplica la tasa de paro de la OCDE en agosto
Se sitúa en el 4,8%, frente al 11,5% de España.
El FMI pronostica que España será incapaz de recortar el paro por debajo del 11% en los próximos años
La tasa de paro en España sigue duplicando la media de los países más desarrollados del mundo (OCDE) en agosto. La tasa de paro de los países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico se mantuvo en su mínimo histórico en agosto, con un 4,8%. Mientras, la de España se situó en el 11,5%, también por encima de la media de la UE y de la zona euro.
De esta manera, la tasa de paro aumentó en cinco países miembros de la entidad multilateral -Suecia, Estados Unidos, Colombia, Estonia y Luxemburgo-, se mantuvo sin cambios en 14 y disminuyó en 13 entre abril y junio. Así, el número de desempleados en el bloque alcanzó los 33,160 millones de personas en el octavo mes del año.
Asimismo, la tasa de desempleo en la Unión Europea cerró al 5,9% y la de la zona euro al 6,4% en agosto, también su mínimo histórico. En lo que respecta a España, el desempleo cayó hasta el 11,5%.
En cuanto al paro juvenil -trabajadores entre los 15 y los 24 años-, aumentó en 0,5 puntos porcentuales en comparación con su tasa más baja registrada en abril de 2023, impulsado principalmente por un aumento en la tasa de desempleo juvenil masculino.
Por otro lado, las tasas de empleo y de participación activa de la OCDE alcanzaron el 70,1% y el 73,7%, respectivamente, en el segundo trimestre del año, los niveles más altos registrados desde el inicio de la serie. Así, se registraron máximos históricos para ambos indicadores en 19 de los 38 países miembros del bloque, entre ellos, Francia, Alemania, Italia y Japón.
Por datos desagregados, la tasa de empleo superó el 70% en algo más de dos tercios de los países de la OCDE, alcanzando máximos históricos en la zona euro y en el conjunto de la Unión Europea.
Por el lado contrario, disminuyó en siete países de la OCDE, incluida Turquía, que registró la tasa de empleo más baja entre los países miembros de la organización, con un 53,6%.
Por sexos, aumentó tanto para las mujeres como para los hombres, alcanzando máximos históricos del 63,2% y el 77%, respectivamente. La tasa de actividad también alcanzó su nivel más alto para las mujeres (66,7%) y para los hombres (80,9%).