La era Sánchez desploma la construcción: España levanta un 37% menos de edificios que en 2018
La economía española levantó un 5% menos de pisos en comparación con 2021
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La construcción de edificios en España se ha desplomado un 37,1% desde que Pedro Sánchez está en el poder, es decir, 2018. Así lo reflejan los datos del portal estadístico de la Comisión Europea, Eurostat, los cuales muestran cómo, en el 2024, la economía española levantó un 5% menos de pisos en comparación con 2021. Esto puede ser una explicación parcial de que, tan sólo en el último trimestre de 2024, la oferta de vivienda de alquiler haya caído un 3% en comparación con el mismo periodo del año anterior.
Eurostat no ofrece datos absolutos, sino relativos. Es decir, esta estadística muestra cómo está el estado de la producción de la construcción de un país en comparación con 2021, año que se utiliza de base para la medición.
De esta forma, al cierre de 2024, el índice del portal de la Comisión Europea se situaba en 94,8%, o lo que es lo mismo, que se levantaron un 94,8% de los edificios que se construyeron en 2021. En cambio, en 2018, año en el que entró Sánchez en el poder, el sector de la construcción produjo un 131,9% más de edificios que en el año base.
Siendo así, la diferencia entre 2018 y 2024 es de 37,1%, por lo que, en los 5 años de Gobierno socialista, la construcción ha sufrido un pronunciado declive que se refleja en las estadísticas oficiales.
La construcción con Sánchez
Las causas son diversas. Una de las más importantes es el gran aumento que han sufrido los costes del sector. Tal y como desveló OKDIARIO, los gastos de estas empresas se han llegado a disparar un 50% en los últimos años. «De 2020 a 2021 los precios de los materiales subieron tanto como de 2007 a 2020 y de 2021 a 2022 subieron tanto como de 2005 a 2020», explicó a este periódico la Confederación Nacional de la Construcción (CNC).
«Un ladrillo, si estaba a 0,16 euros, ahora está a 0,24 euros; el kilo de acero ahora está a más de un euro, a más de un 50% de hace unos años», afirmaron entonces fuentes del sector.
Este aumento de los costes ha afectado a la actividad de todo el sector, pues no sólo han disminuido el número de edificios que se levantan, sino que la producción en general de estas empresas se encuentra un 0,4% por debajo de los niveles de 2021.
Por otro lado, si se compara el índice general con el año en el que Pedro Sánchez llegó al poder, la producción de la construcción ha caído un 24,9% desde 2018. Es decir, la de edificios ha sido 12 puntos más intensa.
Crisis de vivienda
Mientras tanto, España vive una crisis de vivienda cada vez más pronunciada. El precio del alquiler se disparó en el país un 11,8% en enero en comparación con el mismo mes del año pasado, según los últimos datos publicados por Idealista.
En ese mes, la inflación española no alcanzó el 3%, por lo que el coste de arrendar fue cuatro veces mayor que el IPC general. Es decir, la presión al alza de los precios de la vivienda es mucho mayor que la que sufren el resto de servicios y bienes.
Por ello, los últimos estudios señalan que las familias con ingresos que se encuentran en la media nacional no pueden permitirse el alquiler del 68% de la oferta actual de vivienda. Para acceder a estas, los hogares españoles tendrían que destinar más del 30% de sus rentas a la mensualidad, hasta un máximo de 764 euros.
Por otro lado, la oferta retrocede. El mercado del alquiler permanente continúa su tendencia a la baja, acumulando tres años y medio de descensos interanuales y situándose apenas un 5% por encima del mínimo histórico registrado en junio de 2024.
En el caso de Barcelona, aunque no ha tocado mínimos, la oferta se encuentra apenas un 7% por encima de su registro más bajo. Así, aplicar en la ciudad la Ley de Vivienda de Sánchez y reconocer las zonas tensionadas no ha servido para amortiguar los efectos de la crisis inmobiliaria en la zona.