La otra cara de la crisis de vivienda: los costes de la construcción suben un 50% y falta mano de obra
La patronal de la construcción asegura que "en un año" sus costes subieron "lo mismo que en 15"
La crisis de vivienda en España contiene numerosas aristas que hacen que el problema se vuelva más irresoluble, como la subida de los costes del sector de la construcción. Las empresas que se dedican a esta actividad soportan unos gastos que, según cuentan fuentes solventes del sector a OKDIARIO, han aumentado alrededor de un 50% en los últimos 10 años: «Una obra que antes costaba 2 millones, ahora cuesta tres». Por su parte, la Confederación Nacional de la Construcción (CNC) lo confirma: «De 2020 a 2021 los precios de los materiales subieron tanto como de 2007 a 2020 y de 2021 a 2022 subieron tanto como de 2005 a 2020».
Así, la patronal de la construcción asegura que «en un año» sus costes subieron «lo mismo que en 15». «Y ahora hay una tendencia a la estabilización, pero en máximos».
Por tanto, la subida de los precios del alquiler y de la vivienda se encuentra con otro problema. Y es que el aumento de la oferta, es decir, la construcción de más inmuebles, se ve frenada por el aumento de costes, un límite que impide que el mercado deje de estar tensionado.
Los costes de la construcción
«No es que un albañil gane más, es que la empresa que tiene albañiles gana más», explican las fuentes.
«Los costes de mano de obra han subido muchísimo y, además, casi no hay», explican las fuentes del sector. Sin embargo, el coste laboral no se ha traducido en mejores salarios: «No es que un albañil gane más, es que la empresa que tiene albañiles gana más».
«Se recurre a subcontratas para tener empleados en vez de contratar por cuenta propia, y estas ganan más sin que se traduzca en una mejora de las condiciones de los trabajadores», aseguran las mismas fuentes.
Esto se suma a que «los materiales también han subido». «Un ladrillo, si estaba a 0,16 euros, ahora está a 0,24 euros; el kilo de acero ahora está a más de un euro, a más de un 50% de hace unos años», lamentan.
Lo mismo afirma la CNC: «La construcción lleva soportando cuatro años subidas importantes de los costes, sin contar con ninguna medida de estabilización de precios en los contratos públicos frente a las sensibles fluctuaciones en los materiales básicos del sector y la energía. Esto provoca incertidumbre, desestabilización o cierre de empresas; además de originar ralentización, paralización o abandono de contratos».
Así, el sector recuerda que la energía que consume «experimentó un incremento del 190% desde el año 2020 hasta mediados de 2022». Para la patronal, «urge, pues, volver al modelo de revisión de precios anterior a 2015, cuando se aprobó la Ley 2/2015 de desindexación de la economía española, en momentos de estabilidad económica y geopolítica, y sin la inflación global de precios que sufrimos hoy».
«Además de volver al modelo anterior a 2015, que no fue ni conflictivo ni cuestionado para la contratación pública, resulta imprescindible que no excluya la revisión y actualización de los costes de la mano de obra, porque el SMI ha subido más de un 50% desde 2018», denuncia la patronal de la construcción.
La crisis de vivienda
«Aprobar este mecanismo de revisión de precios sería la mejor manera de aportar estabilidad y certidumbre al sector de la construcción, además de servir para acabar con el reguero de licitaciones que están quedando desiertas, lo que en última instancia constituye una amenaza para el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia», reclama la CNC.
Mientras tanto, el precio del alquiler que soportan los españoles se ha disparado un 10,2% en el tercer trimestre de 2024 en comparación con el mismo periodo del año pasado, hasta una media de 13 euros por metro cuadrado, según el último informe del portal inmobiliario Idealista publicado este martes.
De las 51 capitales españolas analizadas por el portal, 28 han alcanzado precios máximos este trimestre. En cuanto a las provincias, todas registran un aumento en los precios de alquiler.
Por tanto, España se encuentra sumida en una crisis de vivienda. Uno de los remedios a esta situación podría ser promocionar la construcción. Sin embargo, el sector tiene cada vez más problemas para mantener su rentabilidad, con unos costes en aumento que hacen más difícil realizar su actividad como hace unos años.