La banca prevé que la firma de hipotecas fijas siga al alza y que el euríbor no supere el 0,4% en 2022

La banca española prevé que la firma de hipotecas a tipo fijo siga creciendo durante el actual ejercicio debido a la tendencia alcista del euríbor, que cerró el mes de abril en el 0,013%, su tasa más alta desde febrero de 2016. Sin embargo, entidades como BBVA, Caixabank, ING o Abanca aseguran que la situación del mercado hipotecario no es de alarma y que todavía es un buen momento para financiar la compra de una vivienda.

El escenario de tipos en positivo que se aproxima «es lo normal, lo extraordinario es un euríbor en negativo como el que hemos tenido durante seis años», ha asegurado Cristina de Marcos, responsable de hipotecas en ING, durante el evento ‘El impacto de la subida de tipos de interés en las hipotecas’, organizado por el portal inmobiliario Fotocasa.

Por su parte, Ana Pitarch, responsable de clientes particulares de BBVA, se ha atrevido a hacer predicciones y aunque ha reconocido que el euríbor continuará al alza en los próximos meses, cree que no alcanzará una tasa desorbitada. «Cerrará el 2022 en torno al 0,4% y subirá hasta el 1% en 2023», ha apuntado.

Impacto «limitado»

De Marcos ha incidido en que el impacto de la subida de los tipos en las hipotecas será «limitado siempre y cuando se produzca una subida paulatina». La Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos ya ha elevado los tipos de interés en 50 puntos básicos y el mercado ya da por descontado que el Banco Central Europeo (BCE) lo hará en dos ocasiones este año a partir del verano y en otras tres o cuatro el ejercicio que viene. Aunque se prevé que será de manera gradual.

Por ello, los representantes de los cuatro bancos han coincidido en que la subida de tipos «tendrá un impacto pequeño y gradual» en las hipotecas y en la economía de las familias. «Seguirán siendo tipos negativos reales porque la inflación está por encima», ha matizado Ramón Faura, director de banca de particulares de CaixaBank.

Impacto en la oferta y la demanda

Respecto al impacto de la subida de tipos en la demanda de hipotecas, los expertos creen que seguirá creciendo este año de la mano del auge de la compraventa de viviendas. No obstante, han matizado que lo hará a un ritmo menor que en 2021, cuando el mercado registró las mejores cifras en una década debido a las operaciones que se pospusieron en 2020 debido a la pandemia.

Los bancos descartan que la firma de hipotecas –que ha crecido un 19% en el primer trimestre del año- vaya a descender o que su precio vaya a subir notablemente. En concreto, Pitarch cree que tendrá más impacto en este mercado la escasez de mano de obra porque habrá menor oferta de viviendas de obra nueva.

Los bancos insisten en que no sólo se debe tener en cuenta la subida de tipos para la contratación de un crédito hipotecario; sino que hay que tener en cuenta otras variables como «el precio del alquiler, que en algunas regiones está muy elevado, lo que hace que optar por una hipoteca sea una alternativa atractiva», ha argumentado Rocío Rodríguez, coordinadora de desarrollo de negocio en Abanca.