La venta de Joao financiará la renovación de la plantilla

La venta de Joao Félix en el próximo mercado de verano financiará la profunda renovación de la plantilla que efectuará el Atlético de Madrid cuando acabe la temporada, pero el club ya asume una gran pérdida de dinero en el traspaso del portugués, que en las tres temporadas que lleva en el club ha sido incapaz de mostrar la regularidad que se esperaba de él.

Aunque la postura oficial es de apoyo a Joao, lo cierto es que de puertas para dentro se es consciente de que la etapa del menino en el Atlético debe llegar a su fin este verano. Joao ha jugado 94 partidos oficiales como rojiblanco en los que ha marcado 23 goles pero, sobre todo, más allá de los números, lo que subyace es la sensación de que el jugador no ha sido capaz de demostrar en ningún momento la fama de la que venía precedido cuando fue fichado del Benfica por 126 millones de euros, la cantidad más alta pagada jamás por el club. Tres años después la web Transfermarkt le da un valor de mercado de 60 millones, menos de la mitad de lo que costó.

Bayern, City o PSG se perfilan como potenciales compradores de Joao, que por edad sigue siendo un jugador muy apetecible y que quizás en otro club y en otro entorno sí sea capaz de desarrollar el potencial que en Madrid se le ha visto sólo a cuentagotas. El Atlético debe efectuar una profunda inversión para remodelar la plantilla y la venta del portugués se presenta como la fórmula más directa para obtener el dinero necesario para afrontar el fichaje de un delantero centro top que sustituya a Luis Suárez.

La ficha del uruguayo, que está claro que no continuará, será también una fuente de ahorro importante para el Atlético, que dispondrá de más libertad a la hora de cumplir el límite salarial de la próxima temporada, muy condicionado en ésta por el elevado sueldo del delantero charrúa. Para sustituir a Suárez el objetivo número 1 es Vlahovic, lo que implicará una altísima inversión para sacarlo de la Fiorentina.

Se acabará así la etapa como rojiblanco de Joao Félix, cuya relación con Simeone nunca fue la ideal. El portugués jamás quiso entrar en el corsé táctico que exige el argentino, que no duda de su calidad, pero sí de su capacidad de sacrificio. Joao ha dejado destellos en el Atlético, pero nunca se han caracterizado por una línea de continuidad que cabía esperar de un jugador al que se consideraba una de las promesas con más futuro del mundo.