Tonali y Fagioli reconocen su adicción al juego y se ponen en manos de especialistas
Fagioli mencionó el nombre de Tonali durante la investigación
Posibles castigos de hasta tres años alejados de los terrenos de juego
Los jugadores italianos Sandro Tonali y Nicolo Fagioli han reconocido que son adictos al juego y ya se han puesto en manos de profesionales para superar sus problemas de ludopatía. Ambos están siendo investigados por la Fiscalía de Turín por el caso Apuestas, que se desató en Italia la pasada semana en plena concentración de la selección italiana y que involucra a más futbolistas.
Fagioli, jugador de la Juventus, fue el primer nombre en salir a la luz en el escándalo en el que también se encuentran involucrados Nicolo Zaniolo y Sandro Tonali de manera oficial. Un escándalo al que la Fiscalía de Turín llegó por casualidad mientras investigaba una red de apuestas en sitios ilegales en las que podría estar involucrado el crimen organizado italiano.
El joven centrocampista de la Juventus confesó su culpa a la Federación Italiana de Fútbol (FIGC) en cuanto supo que estaba siendo investigado formalmente por la justicia ordinaria para colaborar e intentar rebajar su sanción deportiva.
Y es que la sanción que puede imponer la justicia ordinaria a los implicados no es por haber apostado, sino por haberlo hecho en sitios en línea clandestinos e ilegales; mientras que la justicia deportiva es la que podría imponer la sanción más severa en caso de demostrarse que los jugadores apostaron en partidos de fútbol, con un castigo que va desde un mínimo de tres años alejados de los terrenos de juego y de una multa mínima de 25.000 euros.
Fagioli, cuya investigación se remonta a verano, ya reconoció haber apostado sobre partidos de fútbol, pero aseguró no haberlo hecho nunca con equipo en los que jugaba, algo que podría ser clave para una posible rebaja en la sanción.
«Nos acercábamos al verano y lo primero que hicimos fue aconsejarle que se autodenunciara y recibiera tratamiento. Nicolò padece ludopatía, un problema que surgió cuando no éramos los agentes. A pesar de ello, decidimos no dejarle solo. Y debo decir que se ha comportado de manera ejemplar desde que firmó con nosotros», declaró el agente del futbolista en una entrevista con el diario Repubblica.
Ahora, según desveló este lunes La Gazzetta dello Sport, está siguiendo un tratamiento de la mano de un especialista en la materia. Además, tiene una persona que le controla las cuentas para detectar posibles movimientos de apuestas.
El hecho de que admitiese los hechos, de que reconociera el problema de su adicción, de que se haya puesto en tratamiento y de que haya colaborado con la justicia deportiva desde el inicio facilitando todo tipo de información; así como la posibilidad de que firme un acuerdo de culpabilidad, podría ser suficiente para reducir su sanción -imposible de evitar con el Código Deportivo en la mano-. Fagioli, según apuntan los rotativos locales, habría mencionado en sus confesiones un único nombre, el de Sandro Tonali, que le habría facilitado el nombre de una aplicación móvil y su instalación para realizar las apuestas.
Tonali, en peligro
El caso de Tonali puede tener consecuencias mucho más drásticas. Y es que en caso de probarse que el exjugador del Milan apostó en partidos de fútbol se perdería casi con total seguridad la próxima Eurocopa 2024 que se celebra en Alemania el próximo verano.
El centrocampista, según desveló el diario Corriere della Sera, también habría reconocido su problema de adicción al juego y estaría ya en busca de ponerse en tratamiento después del duro golpe recibido el pasado jueves, cuando la Policía italiana irrumpió en Coverciano (Florencia), durante el entrenamiento de la selección italiana, para interrogarle junto a Zaniolo. De hecho, las autoridades requisaron sus móviles para recopilar todo tipo de información que sirviera para esclarecer si apostaron en partidos de fútbol o solo a juegos de azar, como así asegura que hizo Zaniolo.
El próximo paso que dará pronto Tonali es el que ya dio Fagioli: autodenunciarse. Según informaron este lunes los principales diarios italianos, el actual jugador del Newcastle ya ha tomado la decisión de hablar con ambas justicias, la ordinaria y la deportiva, para confesar todo, incluyendo apuestas en el mundo del fútbol.
Esto último, en caso de confirmarse, le apartaría casi de manera definitiva de la Eurocopa 2024 y de su equipo. Además, en caso de probarse que apostó en partidos en los que estaba implicado directamente como jugador, la sanción aumentaría hasta un mínimo de 4 años. Eso sí, al igual que en el caso de Fagioli, la colaboración se presenta como un factor clave para obtener una rebaja. La confesión, para que suponga una rebaja de la sanción, tiene que coincidir plenamente con la información recabada de sus dispositivos móviles requisados por las autoridades.