Al Real Madrid le asustan más los viajes que los rivales: 21 horas de vuelo y 17.000 kilómetros
En el Real Madrid están encantados con los rivales que le ha deparado el sorteo de la Champions League con la Roma como principal coco. El equipo madridista se medirá además al CSKA de Moscú y al Viktoria Plzen para completar un grupo donde la conclusión parece evidente: asustan más los viajes que los rivales.
Porque no nos engañemos, ni el CSKA de Moscú ni el Viktoria Plzen entrañan rivales complejos para un Real Madrid que sólo tendrá que temer por los largos desplazamientos que tendrán que afrontar y como mucho al frío que se podrán encontrar en estos campos.
Haciendo las cuentas de esta primera fase, el Real Madrid tendrá que recorrer un total de 17.000 kilómetros viviendo 21 horas de vuelo en total. El desplazamiento más largo será el de Moscú –10 horas de avión y 8.400 kilómetros–, mientras que el más liviano irá ligado a la Roma –5 horas y menos de 4.000 kilómetros–.
Sin embargo, los merengues tendrán que hacer algo más complejo para acudir a su duelo con el Viktoria Plzen. El ciudad en la que reside el equipo checo no dispone de aeropuerto y así las cosas la única manera de llegar a ella de forma eficiente es aterrizando en la capital Praga. El Real Madrid tendría que hacer un desplazamiento de 85 kilómetros por carretera para llegar a disputar su partido y otros 85 de vuelta. No es una odisea, ni mucho menos, pero tampoco es lo más cómodo del mundo.
Por otra parte, el Real Madrid también demandará a la UEFA que vele por el cuidado de los terrenos de juego tanto del Plzen –un patatal en invierno– y el del CSKA –que puede estar nevado– para poder disputar esos encuentros con máximas garantías. Los blancos, más que temer a los rivales, se muestran cautos con los factores que rodean al encuentro.