Se cumple un año del anuncio de su fichaje por Aston Martin

Primer aniversario de Fernando Alonso en Aston Martin: misión cumplida y un gran reto pendiente

Fernando Alonso Aston Martin
Fernando Alonso junto a su equipo. (AFP)
Kike Sáez

El 1 de agosto de 2022 es una fecha clave en la vida de Fernando Alonso. Ese día, Aston Martin detonó la bomba e hizo oficial su fichaje para el Mundial de 2023. Un año se cumple desde que el asturiano decidiera marcharse de Alpine, coincidiendo justamente con su descanso vacacional. Así, se adentró de lleno en un proyecto que, a priori, fue rechazado por la mayoría de sus fieles, puesto que la escudería británica era la séptima clasificada y el pensamiento general es que la única vía para volver a verle reinar pasaba por su continuidad en Enstone, por muchos palos que le estuvieran poniendo en las ruedas.

Sin embargo, la situación a la vuelta del verano era aún más insostenible y el equipo liderado por Otmar Szafnauer en ese momento ninguneó todavía más a Fernando Alonso en el tramo final de Mundial. En las últimas nueve carreras de 2022, el piloto entonces de Alpine tuvo que abandonar hasta en cuatro ocasiones, lo que acabó por cerrar un ciclo de dos años para el olvido, que se culminó con un pinchazo final de su motor en Abu Dhabi.

Por tanto, no le quedaba otra que hacer borrón y cuenta nueva. Y así fue. A los pocos días realizó los primeros test con el coche de Aston Martin y, en marzo, comenzó la nueva era. Fernando Alonso se subía al AMR23 en Baréin para escribir las primeras líneas de su sexta andadura diferente en la Fórmula 1. Un escenario para el que los pronósticos, a medida que se iban sucediendo las pruebas, iban in crescendo. Hasta que, finalmente, se cumplieron.

Fernando Alonso quedó tercero y se volvía a subir al podio después de prácticamente dos años, desde que lo hizo en Qatar 2021. Ese espectacular arranque de temporada lo extendió en el tiempo con cinco podios en las siete primeras carreras y uno más en Canadá. Las palabras hacia Aston Martin sólo podían ser de alabanza y el ambiente festivo comenzó a formar parte de la normalidad tanto en la fábrica de Silverstone como en el garaje de los británicos allá por donde fueran.

Vacaciones necesarias

Pero, en la Fórmula 1, como en la vida, no todo es de color de rosa, por lo que las cosas se iban a empezar a torcer antes del parón veraniego de este año. Fernando Alonso suma ya cuatro pruebas sin subir al podio y Aston Martin dio serios síntomas de flaqueza, más aún observando en primera persona la mejoría de otros equipos a los que ni se les esperaba, como McLaren.

Su 42 cumpleaños y el primer aniversario del fichaje por Aston Martin han coincidido temporalmente y, afortunadamente, ha podido soplar las velas con una sensación de alivio. En el último Gran Premio, el de Bélgica, Alonso tuvo que hacer malabares para conseguir un luchadísimo quinto puesto, con el que se aferra con uñas y dientes a la tercera posición de la tabla del Mundial. Ese es el punto de partida para emprender su segundo capítulo al volante del equipo inglés, con el que firmó hasta la conclusión de 2024.

«Hay que mejorar, no cabe duda, aunque hoy haya ido bien. No pudimos luchar por el podio, tenemos que mejorar. Sirve para subir la moral del equipo. Las últimas carreras nos habían cargado mucho peso. Hay que mejorar, pero con calma y viendo el campeonato con otra perspectiva general». Esas fueron las palabras del piloto español antes de abandonar Spa, aportando un punto de vista realista, pero con la esperanza de que esa mejoría llegue en el Gran Premio de Holanda el próximo 27 de agosto.

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