Pogacar no se apiada de Vingegaard y completa un repoker de etapas en el Tour

Tadej Pogacar consiguió su quinta etapa en el presente Tour de Francia tras imponerse en el sprint final a su archienemigo Jonas Vingegaard en la cumbre de la Col de la Couillole. El esloveno, que ya tiene asegurada la clasificación general, no mostró clemencia con el ciclista danés, que le llevó a 200 metros de meta y le remachó con un sprint final incontestable.

El vigente campeón del Giro de Italia sellará mañana domingo su victoria en el que será su tercer Tour de Francia. Pogacar dejó hacer a sus rivales en todo momento pareciendo que se iba a inhibir en la lucha por la etapa, pero un caníbal de su nivel no pudo dejar escapar el triunfo de etapa cuando parecía que hoy no quería abusar.

La etapa permitió ver una fuga con muchos españoles como protagonistas. Enric Mas y Marc Soler se colaron y fueron protagonistas hasta los últimos kilómetros de meta. La ascensión del Col de la Couillole, sin embargo, seleccionó el grupo tras un tremendo ritmo de Mikel Landa que dejó la ventaja de tres minutos con la que partían a pie de puerto en un minuto en pocos kilómetros.

El alavés se sacrificó por su compañero Remco Evenepoel, pero luego el belga no tuvo el cambio de ritmo necesario para descolgar ni a Vingegaard ni a Pogacar. El danés, de hecho, contragolpeó y se quitó de encima al hombre que aspiraba a quitarle su segunda plaza en la general. Los dos gallos de los últimos cinco Tours de Francia se quedaron mano a mano.

Por delante, sólo quedaban Enric Mas y Richard Carapaz, quienes además no se entendían, dejando a las claras alguna rencilla personal pendiente de la época de Movistar. Los dos fugados, de haber encontrado un acuerdo, probablemente habrían conseguido llegar a meta, pero los hachazos que se fueron dando durante el puerto minimizó sus opciones.

Vingegaard tiró y tiró para distanciar a Evenepoel mientras Pogacar observaba a rueda del líder del Visma. Cuando parecía que el esloveno iba a regalar la etapa a su verdugo de los últimos dos Tours de Francia, el actual maillot amarillo arrancó a 200 metros sellando su quinto triunfo de etapa en la carrera. La voracidad de un campeón indiscutible.